La reciente incorporación de los primeros helicópteros Apache AH-64E a las Fuerzas Armadas Reales marca mucho más que una modernización del material militar: representa un cambio doctrinal y tecnológico profundo en la estrategia aérea de Marruecos. Según el portal especializado Defensa, la llegada de estos aparatos a la base de Joribga simboliza el paso de una flota veterana —los SA342 Gazelle, operativos desde los años ochenta— a una generación de combate adaptada a los desafíos contemporáneos.
El AH-64E, considerado el helicóptero de ataque más avanzado del mundo occidental, combina potencia de fuego, resistencia y sofisticación tecnológica. Su cañón M230 de 30 mm, capaz de disparar más de 600 proyectiles por minuto, se complementa con misiles antitanque AGM-114 Hellfire y cohetes guiados de precisión. La versión marroquí incluye además misiles aire-aire AIM-92H Stinger, destinados a contrarrestar drones y aeronaves ligeras. Equipado con radar AN/APG-78 Longbow y sensores M-TADS/Arrowhead, el aparato puede detectar y priorizar múltiples objetivos hasta 16 kilómetros de distancia, incluso en condiciones meteorológicas extremas, permitiendo al piloto atacar sin exponerse directamente al enemigo.
Más allá de su potencia ofensiva, el Apache destaca por su resistencia y su capacidad de supervivencia en entornos hostiles. Su blindaje reforzado, los sistemas electrónicos de guerra y los depósitos autoobturantes le otorgan una alta protección frente a misiles portátiles, una amenaza constante en los conflictos recientes, como se ha visto en Ucrania. Cada helicóptero, propulsado por dos motores General Electric T700-701D, puede alcanzar los 300 km/h, con una autonomía de casi 500 km, lo que lo convierte en una plataforma adaptada tanto a operaciones de desierto como a misiones de precisión.
Sin embargo, este salto tecnológico tiene un coste. El contrato de 4.250 millones de dólares por 24 unidades exige un esfuerzo paralelo en mantenimiento, formación técnica e infraestructura. Marruecos deberá desarrollar una red de apoyo local y cuadros especializados, apoyándose en los acuerdos de cooperación industrial firmados con Boeing. A ello se suma la necesidad de una coordinación táctica con drones y otros medios, lo que permitirá explotar plenamente el potencial de la aeronave y reducir los riesgos operativos.
En el plano geoestratégico, el AH-64E ofrece a Marruecos una capacidad disuasoria notable frente a amenazas regionales, reforzando su posición en escenarios de frontera y operaciones de apoyo terrestre. No obstante, Defensa advierte que este avance no elimina los desafíos planteados por los sistemas antiaéreos argelinos ni sustituye la necesidad de una estrategia integral de seguridad. La eficacia del Apache dependerá, en última instancia, de la capacidad del Reino para integrar tecnología, doctrina y formación en un entorno regional donde la superioridad militar se mide tanto por la innovación como por la preparación.
12/10/2025