A 23 años de los atentados del 11 de septiembre, las víctimas siguen esperando justicia, según el relator especial de la ONU sobre la lucha contra el terrorismo y los derechos humanos, Ben Saul. El experto criticó a los sucesivos gobiernos estadounidenses por socavar los esfuerzos de rendición de cuentas, señalando que acciones como la tortura y otras violaciones graves del derecho internacional durante la «guerra contra el terror» han quedado en gran medida impunes, enviando un mensaje negativo a nivel global sobre el cumplimiento de la ley internacional.

Saul también destacó las condiciones inadecuadas en el centro de detención de Guantánamo y la falta de apoyo a los exdetenidos, muchos de los cuales han sufrido por la detención prolongada y la tortura sin recibir compensación adecuada. Además, instó a Estados Unidos a aplicar las normas de las Naciones Unidas para la asistencia a todas las víctimas del terrorismo, incluyendo la indemnización y la rehabilitación, para corregir las infracciones pasadas y fortalecer la legitimidad y credibilidad del orden mundial.
12/9/2024