Intensas lluvias torrenciales en el centro de Japón han provocado inundaciones y deslizamientos de tierra, causando la muerte de al menos seis personas y la desaparición de otras dos. La prefectura de Ishikawa, previamente afectada por un terremoto a principios de año, ha sido la más golpeada. Las víctimas incluyen trabajadores atrapados por deslizamientos y residentes arrastrados por las crecidas de ríos y flujos de lodo.

La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) registró niveles de precipitación históricos en la región, superando los 540 mm en Wajima durante el fin de semana. Ante la emergencia, se emitió una alerta máxima y se ordenó la evacuación de más de 100.000 personas. Además de las víctimas mortales, se reportan daños materiales significativos, carreteras bloqueadas, cortes de electricidad y suministro de agua potable.
El ejército se ha desplegado para apoyar las labores de rescate y asistencia en la zona afectada. Expertos señalan que el cambio climático está intensificando la frecuencia e intensidad de estos fenómenos meteorológicos extremos en Japón, aumentando el riesgo de desastres naturales.
23/09/2024