El Parlamento de Venezuela, bajo control oficialista, ha lanzado una propuesta para romper todas las relaciones con España, incluyendo las diplomáticas, consulares, económicas y comerciales. Esta decisión surge después de que el Congreso español reconociera a Edmundo González Urrutia como presidente electo de Venezuela. El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, ha exigido la ruptura inmediata y la salida de todos los representantes españoles, además de pedir el cese de vuelos comerciales y acuerdos entre ambos países. Rodríguez describió la acción española como una «declaración de guerra» contra el pueblo y gobierno de Nicolás Maduro, destacando la disposición de Venezuela a defender su independencia y soberanía.

En respuesta a esta situación, la Asamblea Nacional venezolana ha convocado una sesión extraordinaria para debatir y rechazar lo que califican como una decisión «grosera e injerencista» de la derecha española. Durante esta sesión, se solicitará la redacción inmediata de una resolución para cesar formalmente las relaciones, que esperan aprobar lo antes posible. Por su parte, el eurodiputado Esteban González Pons ha reaccionado indicando que los actos de Venezuela serán evaluados próximamente en el Parlamento Europeo, mientras que el Tribunal Penal Internacional sigue pendiente de los desarrollos.
12/9/2024