EuroCommerce, que representa a los sectores minorista y mayorista de la Unión Europea, ha solicitado un retraso en la aplicación de la nueva legislación de la UE contra la deforestación, que afectará a productos como la carne de vacuno, la soja, la madera y el cacao, y que está programada para entrar en vigor el próximo año, según fuentes del diario El Obrero.
«Apoyamos plenamente los objetivos fundamentales de esta legislación, pero es esencial aclarar numerosos aspectos prácticos para que los minoristas y mayoristas puedan cumplirla adecuadamente», indicó EuroCommerce en un comunicado. La organización ha expresado sus preocupaciones a través de una carta dirigida a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
EuroCommerce argumenta que los minoristas y mayoristas están «particularmente afectados» por el reglamento debido a la diversidad de productos que ofrecen y la amplia red de proveedores, muchos de los cuales son pequeñas y medianas empresas (pymes). «Es prácticamente imposible prepararse adecuada y oportunamente», señalaron, destacando el riesgo de interrupciones en el suministro y la exclusión potencial de las pymes por falta de preparación.
La organización sugiere que la ley debería posponerse «al menos seis meses». El reglamento, que también ha generado preocupaciones en países como Brasil, Canadá, Estados Unidos, China, Australia y Nueva Zelanda, busca prevenir que las importaciones en la UE de ciertas materias primas y productos contribuyan a la deforestación en terceros países.
La normativa, que se aplica de igual manera dentro de la UE, fue introducida hace un año en una fase de prueba y debería ser plenamente efectiva en enero del próximo año, para asegurar que los productos afectados que lleguen al mercado único sean «libres de deforestación».

A pesar de esto, diversos países y sectores están presionando para retrasar su implementación, lo cual ha sido un tema recurrente en las negociaciones de los grupos políticos para apoyar un segundo mandato de Von der Leyen. Durante su discurso de investidura en la Eurocámara la semana pasada, Von der Leyen no mencionó este reglamento, que permanece como un asunto delicado.
Por otro lado, grandes productores de chocolate como Nestlé, Mars Wringley o Ferrero respaldan la normativa y han solicitado a la Comisión que facilite a las empresas el cumplimiento de los requisitos. La normativa también cuenta con el apoyo de Archer Daniels Midland (ADM), una de las principales productoras de soja, que está adoptando medidas para asegurar que sus proveedores cumplan con el reglamento.
Según esta norma, los importadores de los productos citados deben demostrar mediante un sistema de geolocalización que estos no han ocasionado deforestación ni degradación de bosques, tomando como referencia los datos del 31 de diciembre de 2020. Las grandes empresas deben cumplir con este requisito desde el inicio, mientras que las pequeñas empresas tienen un plazo adicional de seis meses, hasta junio de 2025.
Los bosques juegan un papel crucial en la lucha contra el cambio climático al capturar CO2, además de albergar el 86 % de la biodiversidad terrestre mundial y proporcionar 86 millones de empleos globalmente, de acuerdo con el Consejo de la UE. Según WWF, en 2017, la Unión Europea fue responsable del 16 % de la deforestación mundial, solo superada por China, que representó un 24 %.
25/7/2024