En medio de la intensificación del conflicto en la Franja de Gaza, decenas de miles de personas se enfrentan a una situación desesperada tras haber sido desplazadas por órdenes de evacuación emitidas por Israel. Muchos de estos desplazados se han visto obligados a regresar a sus lugares de origen, ya que no han encontrado refugio seguro, exacerbando aún más las ya críticas condiciones de vida en la región.
El ataque militar israelí, que se prolongó durante la noche del jueves, ha dejado sin opciones a muchas familias gazatíes, que ahora se refugian en escuelas y edificios gubernamentales administrados por la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA). Sin embargo, la capacidad de estos refugios es limitada, lo que ha llevado a muchos a volver a sus casas, a pesar de los peligros persistentes.
La vida en Gaza se ha vuelto «más que insoportable», según la UNRWA. La región está plagada de escombros y basura, lo que aumenta el riesgo de enfermedades. La agencia de la ONU ha registrado un aumento en las enfermedades transmisibles, como la diarrea y la hepatitis, que afectan especialmente a niños desnutridos con sistemas inmunológicos debilitados.

La reciente acción militar en Khan Younis ha complicado aún más el acceso a agua potable, en un momento en el que la falta de saneamiento contribuye significativamente a la propagación de enfermedades. Además, el riesgo de explosivos sin detonar sigue siendo una amenaza constante, como lo demuestra el trágico incidente en el que una niña de nueve años murió y otras tres resultaron heridas por la detonación de un artefacto explosivo.
En respuesta a la crisis, la UNRWA y otros organismos de la ONU están trabajando incansablemente para proporcionar agua, alimentos y asistencia médica a los afectados. Sin embargo, la entrega de ayuda se ha visto gravemente obstaculizada por el asedio israelí, la falta de combustible y suministros, y las crecientes órdenes de evacuación que cubren un tercio de Gaza, la mayor desde que comenzó la guerra el 7 de octubre.
Desde el estallido del conflicto, casi 38.000 personas han muerto en Gaza y más de 87.000 han resultado heridas. En Cisjordania, los ataques aéreos han continuado, con 77 palestinos, incluidos 14 niños, muertos en recientes operaciones militares.
Esta catastrófica situación subraya la urgente necesidad de una respuesta internacional coordinada para aliviar el sufrimiento de los gazatíes y buscar una resolución pacífica al conflicto que asegure la protección y el bienestar de todos los civiles afectados.
5/7/2024