Miles de personas se manifestaron en Madrid el domingo en defensa de la sanidad pública, criticando las largas listas de espera y la falta de inversión por parte del Gobierno regional. Los manifestantes acusan al Ejecutivo de estar desmantelando la sanidad pública en favor de un modelo basado en la privatización de la gestión sanitaria, según fuentes de El País, y otros medios.
La protesta, convocada por la plataforma Vecinas y Vecinos de Barrios y Pueblos de Madrid, contó con el apoyo de sindicatos y la participación de la ministra de Sanidad del Gobierno español, Mónica García, quien declaró que la sanidad pública «no se vende, se defiende». Roberto Tormamira, portavoz del colectivo convocante, destacó que la sanidad pública «es de todos los ciudadanos» y está siendo pagada por los contribuyentes «durante generaciones», pero ahora «se está privatizando».

Los manifestantes pidieron una mayor inversión pública y criticaron que las listas de espera en la comunidad autónoma de Madrid, donde la sanidad es gestionada por el Gobierno regional del Partido Popular (PP), sobrepasan el millón de pacientes para una variedad de pruebas diagnósticas e intervenciones. También señalaron que la atención primaria está siendo «desmantelada», lo que está llevando al «colapso» de los hospitales, y mencionaron la reducción de camas hospitalarias y la disminución del número de pediatras en los últimos años.
A la cabeza de la manifestación estaba la ministra de Sanidad, Mónica García, quien además de ser médico anestesista, es líder de la oposición por Podemos y Más Madrid en la Asamblea de Madrid. Ella ha sido una defensora ferviente de la sanidad pública y ha convertido esta lucha en su principal preocupación. “Donde se hace patria es aquí, no hay mejor patria que la sanidad pública”, declaró la ministra.
Esta manifestación es la tercera gran movilización en defensa de la sanidad pública en poco tiempo, siguiendo las protestas del 13 de noviembre de 2022 y el 12 de febrero de 2023, que sumaron hasta 450,000 asistentes según la Delegación de Gobierno (un millón y medio según los organizadores). A pesar de la frecuencia de las convocatorias, la afluencia ha superado las expectativas de los organizadores.
La protesta reflejó un consenso general en la defensa de la sanidad pública, con participación de personas de todas las edades. Alexia, una estudiante de 17 años de Parla, mencionó: “Mi madre trabaja en el hospital de La Paz y sabemos de primera mano la saturación y falta de recursos que hay”. Margarita, de 49 años, acompañó a su hijo para que aprendiera la importancia de estas movilizaciones desde pequeño. “Como usuaria de la sanidad y familiar de pacientes enfermos, la gente tiene que darse cuenta de lo importante que es acortar los tiempos de atención y potenciar la investigación”, afirmó.
20/5/2024