El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha expresado este martes su preocupación por la ofensiva terrestre lanzada por el Ejército israelí en Rafah, advirtiendo que esto provocará una crisis humanitaria aún mayor que la existente en la ya afectada Franja de Gaza. El diplomático español realizó estas declaraciones al llegar a una reunión del Consejo de ministros comunitarios de Desarrollo, donde expresó su inquietud sobre la situación.
En este sentido, el alto representante lamentó que la ofensiva terrestre israelí en Rafah haya comenzado a pesar de las solicitudes de la comunidad internacional y los llamados a Netanyahu para que no atacara. Además, recordó que en la Franja hay 600,000 niños que serán desplazados a zonas que se consideran «seguras», aunque él enfatizó que no hay áreas seguras en Gaza.

Asimismo, el político también mencionó que la Unión Europea no cuenta con información directa del terreno, obteniendo la información de los medios de comunicación y de las Naciones Unidas, que tienen capacidad para evaluar la situación en el lugar.
Cuando se le preguntó si los ministros europeos tomarán alguna medida ante esta situación, Borrell dijo que los titulares de Desarrollo discutirán sobre cómo aumentar el apoyo, mientras que la próxima reunión de los ministros de Exteriores, el próximo 27 de mayo, considerará la situación política.
En este contexto, destacó que no ve razón para no reanudar plenamente los pagos a la UNRWA después del informe independiente elaborado por Catherine Colonna, exministra francesa, tras las acusaciones israelíes de terrorismo contra el organismo. Tras este informe, Borrell afirmó que «la idea de cortar financiación a la UNRWA no tiene base» y recordó que todos los Estados miembros han reanudado los pagos a la agencia, una «institución crítica para cientos de miles de personas».
EFE
07/05/2024