La economía de España ha comenzado el año 2024 con una robustez notable, manteniendo el impulso de crecimiento observado a finales del 2023. El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha informado que el Producto Interno Bruto (PIB) del país experimentó un incremento del 0.7% en el primer trimestre del año, cifra que se alinea con el crecimiento del trimestre anterior tras una revisión al alza de una décima.
El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha comentado que la economía española ha demostrado un «buen comportamiento» durante el último tramo del año pasado y que el «buen dato» del primer trimestre posiciona a España de manera «óptima» para alcanzar la meta de crecimiento del 2% estipulada para 2024 en el Plan Presupuestario.

Según el informe del INE, la economía ha registrado un avance del 2.4% en una comparación interanual. Si este ritmo se sostiene, es probable que el crecimiento anual supere las proyecciones actuales que rondan el 2%, según previsiones de varios organismos y centros de estudios. El ministro Cuerpo subraya que estos datos validan el «crecimiento diferencial» de España en comparación con las principales economías de la zona euro, un detalle que Eurostat también se dispone a confirmar.
La composición del crecimiento en este trimestre refleja contribuciones positivas tanto de la demanda nacional como de la externa. Destacan especialmente las exportaciones de bienes y servicios, que aumentaron un 2.4% trimestralmente, pese a un contexto global de tensiones en las cadenas de suministro a finales de 2023. Por otro lado, el consumo de los hogares avanzó un 0.3%, beneficiado por el aumento del poder adquisitivo y una evolución favorable del empleo, a pesar de un incremento en la tasa de paro y una disminución en la ocupación típicos del período estacional.
En términos de inversión, la formación bruta de capital fijo experimentó una mejora del 1.3%, aunque todavía no alcanza los niveles previos a la pandemia. Contrariamente, el consumo público cayó un 1% respecto al trimestre anterior, donde había mostrado un incremento significativo.
Por sectores, todas las ramas principales mostraron crecimiento en su valor añadido. Las industrias crecieron un 1.6% respecto al último trimestre de 2023, siendo la manufactura la que más aceleró, alcanzando un crecimiento del 2.2%. La construcción y los servicios experimentaron aumentos, aunque este último a un ritmo más moderado.
En cuanto a los salarios, la remuneración de los asalariados subió un 8.4% en tasa interanual. Este incremento es superior al crecimiento en el número de empleos, lo que sugiere una mejora en la remuneración media por puesto de trabajo. Sin embargo, el excedente de explotación bruto, un indicativo de los beneficios empresariales, aunque creció interanualmente, mostró una reducción respecto al trimestre anterior.
El INE aclara que estos resultados preliminares se basan en datos disponibles hasta febrero de 2024 y serán objeto de futuras revisiones, en consonancia con las directrices de Eurostat y otras entidades estadísticas internacionales. Este cuidadoso análisis destaca la capacidad de adaptación y crecimiento de la economía española en un contexto global incierto y demuestra su posición destacada en la nueva economía global.
30/4/2024