
El ex embajador de Francia en Argel, Xavier Driencourt, publicó un libro titulado «El enigma argelino. Crónica de una embajada en Argel».
El diplomático francés deploró que “Francia lucha por seguir una pauta en sus relaciones con Argelia” ofrece su receta para frenar el chantaje permanente del régimen argelino: “cerrar el grifo de los visados” y “establecer un equilibrio de poder” con Argelia, reexaminar los acuerdos de 1968 para controlar la inmigración masiva de argelinos.
Recientemente, condenó enérgicamente el acuerdo franco-argelino que regula la circulación, el empleo y la estancia de los nacionales argelinos en Francia. Para Driencourt, el texto, obsoleto en el contexto actual, “favorece a los argelinos frente a otras nacionalidades”. «Replantear toda la cuestión, denunciar o al menos amenazar con denunciar el acuerdo de 1968 sería efectivamente un medio de presión para que los 20 consulados argelinos sean más dinámicos y cooperativos en la cuestión de los pases consulares», detalló.
“Argelia es un país opaco, enigmático, muy cerrado para nosotros mientras que, para ellos, Francia es un libro abierto”, lamentó en una entrevista concedida a principios de 2024.
09-03-2024