El aumento significativo de las disoluciones empresariales, alcanzando un 18% en 2022 con respecto al año anterior y un 28% en comparación con 2019, es motivo de «preocupación», según Amal Al-Idrissi, directora ejecutiva del Observatorio Marroquí de las Muy Pequeñas, Pequeñas y Medianas Empresas, en una declaración a la Agencia Oficial de Prensa Marroquí (MAP).
Al-Idrissi destaca la importancia de abordar las vulnerabilidades financieras que llevan a la cancelación anticipada de empresas, especialmente aquellas con menos de 5 años de antigüedad, que representan el 50% de las amortizaciones.

El endeudamiento bancario concentra el 99,5% de las deudas financieras de las empresas, llegando a 609,8 mil millones de dírhams en 2022, un aumento del 8% en comparación con el año anterior. Para fomentar el crecimiento empresarial en Marruecos, el Observatorio propone dos enfoques clave: la adopción de un enfoque basado en datos y la evaluación del impacto de políticas y programas para una mejora continua.
Al-Idrissi destaca el papel crucial de las pequeñas y medianas empresas en el crecimiento económico e innovación en Marruecos, subrayando la necesidad de herramientas proporcionadas por el Observatorio para una toma de decisiones informada. A pesar de los desafíos, estas empresas contribuyen significativamente a la facturación (26%) y al valor añadido (35%), destacando su estabilidad en la estructura del tejido productivo, a pesar de enfrentar dificultades como el acceso a la financiación y un entorno económico marcado por crisis sucesivas.
24/01/2024