
El Banco Mundial espera que el crecimiento económico en Marruecos alcance el 2,8%, frente al 2,9% esperado por el gobierno este año, y confirma la resiliencia de la economía del país frente a las perturbaciones.
El banco explicó en un informe sobre la economía marroquí , revelado el fin de semana del 18 de noviembre de 2023 durante una rueda de prensa, que el crecimiento esperado para el año en curso resulta de la reanudación parcial de la producción agrícola, de los servicios y de las exportaciones netas.
El crecimiento esperado para este año se produce después de la fuerte desaceleración observada el año pasado, como resultado de varios shocks climáticos y de materias primas superpuestos.
El informe, publicado bajo el título «De la resiliencia a la prosperidad compartida», prevé sin embargo que la recuperación se reforzará a medio plazo y que la tasa de crecimiento alcanzará el 3,1% el próximo año, el 3,3% en 2025 y el 3,5% en 2026, con la recuperación de la demanda local, de forma gradual tras los recientes shocks.
El pasado mes de septiembre, el Banco Central de Marruecos esperaba que el crecimiento mejorara hasta el 2,9% en 2023, y hasta el 3,2% el año que viene, sin tener en cuenta los efectos del terremoto de Al Hauz y las repercusiones previstas en la reconstrucción y la recuperación.
El informe señala que la inflación se redujo a la mitad entre febrero y agosto pasados, pero señala que la inflación de los precios de los alimentos sigue siendo alta y afecta desproporcionadamente a las familias pobres.
El Banco Mundial considera que Marruecos ha demostrado su gran capacidad para responder eficazmente a las crisis en los últimos años, señalando que el terremoto de Al Hauz ocurrido el 8 de septiembre fue el último de una serie de crisis que han afectado al país desde el Covid-19, ya que «el país pudo gestionar con éxito la respuesta humanitaria al terremoto y desarrollar un ambicioso plan de desarrollo para desbloquear el potencial de desarrollo de las regiones más afectadas”.
Señaló que la resiliencia de Marruecos también se manifiesta en «la fuerte demanda externa de bienes y servicios del país a pesar de la desaceleración económica mundial».
Estimó que “los flujos de inversión extranjera directa siguen siendo fuertes y cada vez más dirigidos hacia el sector manufacturero. Han surgido varios campos industriales modernos, bien conectados con las cadenas de valor globales, y el país ha mantenido su acceso a los mercados de capital internacionales, a pesar del continuo endurecimiento de las condiciones financieras en los mercados globales”.
20-11-2023









