El reciente discurso del Ministro del Interior y Seguridad Pública de Senegal, Jean-Baptiste Tine, con motivo del 26 aniversario de la Fiesta del Trono marroquí, ha puesto de manifiesto la creciente importancia del eje Senegal-Marruecos como motor de desarrollo e integración en África. Más allá de una simple felicitación protocolaria, las palabras de Tine dibujan un panorama de colaboración estratégica que trasciende lo bilateral y se proyecta como un modelo de cooperación Sur-Sur.
Tine no escatimó elogios al destacar el «rol estratégico» de Marruecos en la promoción de la integración regional y la reforma del multilateralismo. Enfatizó la visión panafricanista del Rey Mohammed VI y el compromiso del reino alauí con la paz y la estabilidad del continente. Esta visión, según el ministro senegalés, se materializa en contribuciones concretas a la seguridad alimentaria y la transición energética, áreas cruciales para el desarrollo sostenible de África.
El discurso cobra especial relevancia en el contexto actual de un mundo multipolar y de los desafíos que enfrenta el continente africano, desde la inseguridad alimentaria hasta el cambio climático. En este escenario, la apuesta por un «multilateralismo más equitativo e inclusivo,» defendida por ambos países, se presenta como una alternativa necesaria a los modelos tradicionales de cooperación internacional.
La sintonía entre Senegal y Marruecos no se limita a la retórica. Tine subrayó los «lazos seculares de fraternidad, espiritualidad y cooperación» que unen a ambos países. Esta sólida base histórica se traduce en una cooperación dinámica en sectores clave como educación, finanzas, agricultura y seguridad, con un flujo constante de inversiones marroquíes en Senegal, generando empleo y transferencia de conocimiento.
El aspecto cultural y espiritual también ocupa un lugar destacado en la relación bilateral, simbolizado por el «peregrinaje» anual de miles de senegaleses a Marruecos, un testimonio vivo de la profunda conexión entre ambos pueblos. Este intercambio cultural, que va más allá de lo religioso, fortalece los lazos de entendimiento y contribuye a la construcción de una identidad africana compartida.
En definitiva, la visión compartida de «construir una África fuerte, soberana y solidaria» se erige como el pilar fundamental de la alianza Senegal-Marruecos. Un modelo de cooperación Sur-Sur basado en el pragmatismo, la reciprocidad y la búsqueda de soluciones conjuntas a los desafíos comunes, que podría inspirar a otros países africanos a forjar alianzas estratégicas para un futuro más próspero y estable. El discurso de Tine no solo celebra una efeméride, sino que lanza un mensaje de optimismo y confianza en el potencial de África para tomar las riendas de su propio destino.
31/07/2025









