Marruecos da señales claras de estar preparando un salto cualitativo en su estrategia de defensa, avanzando hacia la adquisición de aeronaves de guerra electrónica y vigilancia estratégica basadas en la plataforma Bombardier Global 6500. Esta evolución forma parte de un enfoque más amplio que busca dotar al país de capacidades autónomas para operaciones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR), consolidando así su papel como uno de los actores más dinámicos en la arquitectura de seguridad del norte de África.
El modelo Bombardier Global 6500 no es una simple aeronave de transporte: adaptado para misiones militares, destaca por su gran autonomía —capaz de volar más de 12.000 kilómetros y mantenerse en el aire durante 18 horas continuas—, lo que lo convierte en una herramienta ideal para recopilar información de señales (SIGINT), interceptar comunicaciones enemigas y cartografiar amenazas terrestres en profundidad.
Según fuentes especializadas como Defense Atlas, un prototipo de esta plataforma fue recientemente observado en condiciones que apuntan a un fuerte interés por parte de Rabat. La aeronave puede ser equipada con sensores de alta precisión, antenas externas, sistemas radar de última generación y estaciones internas de análisis, lo que permitiría a las Fuerzas Armadas Reales obtener inteligencia táctica en tiempo real y con proyección más allá de sus fronteras inmediatas.
Interoperabilidad con el arsenal existente
Las pistas sobre esta operación se consolidaron durante el Marrakech Air Show 2024, donde fue exhibida una versión modificada del Global 6500 con los colores marroquíes. En una de las presentaciones audiovisuales, se observaba su interacción con otros activos del arsenal nacional, como los cazas F-16 y drones armados tipo Bayraktar TB2 y Wing Loong II. Este enfoque no es casual: Marruecos está construyendo una doctrina basada en la interoperabilidad de medios aéreos, capaces de actuar con rapidez y precisión ante amenazas convencionales o asimétricas.
En esta lógica de modernización, el sistema ISR serviría como eje central para la coordinación de misiones complejas, desde la vigilancia marítima hasta la guerra electrónica, pasando por la guía de misiles de largo alcance. Cabe recordar que el país ya ha dado pasos firmes en esa dirección con la adquisición de sistemas HIMARS con misiles ATACMS, así como los Predator Hawk y LORA, lo cual apunta a una arquitectura de defensa orientada a la proyección regional.
Colaboración tecnológica y autonomía industrial
Más allá de la compra del aparato, lo que realmente destaca en este movimiento es la intención de Marruecos de posicionarse también como un centro tecnológico y de mantenimiento avanzado. La reciente instalación de una sede de Elta Systems, empresa israelí especializada en radares y guerra electrónica, abre la puerta a una transferencia de tecnología relevante. Se especula incluso con el ensamblaje local de sensores y componentes, en una sinergia con proveedores como L3Harris, lo que encajaría con la visión del reino de reforzar su soberanía industrial en defensa.
Esta colaboración israelí-marroquí se enmarca en un contexto geopolítico donde el Reino ha sabido consolidar alianzas estratégicas sin renunciar a una política de autonomía. La incorporación del Bombardier Global 6500 no es solo una adquisición puntual, sino un reflejo de una estrategia a largo plazo que busca garantizar a Marruecos una superioridad tecnológica disuasiva en su entorno regional.
Hacia una nueva dimensión estratégica
Con esta apuesta por plataformas aéreas de uso dual —civil y militar— altamente especializadas, Marruecos se acerca a un reducido grupo de países como Estados Unidos, Canadá y Alemania, que ya operan jets ejecutivos convertidos en centros de inteligencia aerotransportada. La decisión final parece ser ya una cuestión de calendario, más que de voluntad política o técnica.
En un momento en que el Sahel y la cuenca atlántica africana enfrentan una proliferación de amenazas terroristas y desafíos geopolíticos complejos, la capacidad de anticiparse mediante tecnología ISR avanzada podría marcar la diferencia. Marruecos, consciente de este entorno cambiante, está construyendo una defensa proactiva basada en la inteligencia, la cooperación tecnológica y la autonomía operacional.
15/06/2025
