El panorama monetario marroquí experimentó un crecimiento significativo durante marzo de 2025, según el último boletín estadístico de Bank Al-Maghrib (BAM). La masa monetaria (agregado M3), que alcanzó los 1.912,5 mil millones de dirhams, registró un aumento interanual del 8%. Este incremento, aunque considerable, se explica a través de varios factores interrelacionados que requieren un análisis detallado.
El informe de BAM destaca la aceleración del crecimiento en diferentes componentes clave del agregado M3. En primer lugar, se observa un aumento en los créditos netos sobre la Administración Central, pasando de un crecimiento interanual del 7% a un 7,5%. De igual manera, los activos de reserva oficiales experimentaron una aceleración, subiendo del 2,3% al 2,5%. Finalmente, el crédito bancario al sector no financiero también contribuyó al crecimiento global, incrementándose del 3,5% al 3,9%.
Sin embargo, el motor principal de este crecimiento reside en la dinámica de los depósitos y la circulación de la moneda. Los depósitos a la vista en las entidades bancarias mostraron un notable incremento, pasando de un crecimiento interanual del 10,3% a un 11,4%. Paralelamente, la moneda fiduciaria experimentó una alza significativa, acelerándose del 7,8% al 9,3%. La inversión en títulos de OPCVM (Organismos de Placement Colectivo en Valores Mobiliarios) también jugó un papel crucial, con un impresionante salto del 8,7% al 17,9%.
Este panorama positivo se ve matizado por el comportamiento de los depósitos a plazo, que registraron una caída del 0,7% tras un aumento del 1,4% en el período anterior, sugiriendo una posible reorientación de las estrategias de inversión por parte de los agentes económicos.
Analizando la distribución sectorial, se observa una relativa estabilidad en el crecimiento de los activos monetarios de los hogares, que se mantuvieron en un 5,9%. En contraste, las empresas privadas no financieras mostraron una aceleración en el crecimiento de sus activos, pasando de un 18,5% a un 18,7%, lo que podría indicar un mayor dinamismo en la actividad empresarial.
En conclusión, el crecimiento del 8% de la masa monetaria en marzo de 2025 refleja una compleja interacción de factores, desde la política fiscal y la gestión de la reserva oficial hasta las decisiones de inversión de los hogares y las empresas. Si bien el panorama general es positivo, el seguimiento de la evolución de los depósitos a plazo y el análisis más profundo del comportamiento sectorial serán cruciales para comprender la sostenibilidad de esta tendencia en los meses venideros. El próximo boletín de BAM será clave para determinar si este impulso se consolida o representa una fluctuación coyuntural.
01/05/2025









