El presidente de la Cámara de Representantes de Marruecos, Rachid Talbi El Alami, se reunió en Rabat con figuras clave del panorama parlamentario de Oriente Medio, en un encuentro que subraya la creciente importancia del diálogo Sur-Sur. Las conversaciones con Ali Bin Saleh Al-Saleh, presidente del Consejo de la Shura de Bahréin, y Hamda bint Hassan Al-Sulaiti, vicepresidenta del Consejo de la Shura de Qatar, tuvieron lugar en el marco del 3er Foro del Diálogo Parlamentario Sur-Sur, un evento de alto nivel celebrado bajo el patrocinio del rey Mohammed VI.
Más allá de la cortesía diplomática, estos encuentros reflejan una voluntad tangible de fortalecer los lazos históricos y fraternos entre Marruecos, Bahréin y Qatar. El foco, según fuentes cercanas a la Cámara de Representantes, se centró en la necesidad de intensificar la cooperación parlamentaria, compartiendo experiencias y coordinando estrategias en un contexto geopolítico cada vez más complejo.
La agenda abarcó temas cruciales para el desarrollo sostenible en diversas regiones, desde África y Asia hasta Latinoamérica y el mundo árabe. Se hizo especial hincapié en el respeto a la soberanía nacional y la no injerencia en asuntos internos, principios fundamentales para una cooperación Sur-Sur genuina y eficaz. Este énfasis sugiere un deseo compartido de construir alianzas basadas en la igualdad y el respeto mutuo, alejadas de las dinámicas tradicionales de poder que a menudo caracterizan las relaciones Norte-Sur.
El encuentro también sirvió como plataforma para destacar los avances de Marruecos bajo el liderazgo del rey Mohammed VI. Se elogiaron las iniciativas de desarrollo y solidaridad impulsadas por el monarca, presentándolas como un modelo a seguir en la cooperación Sur-Sur. Este reconocimiento no solo refuerza la imagen de Marruecos como un actor clave en el escenario internacional, sino que también legitima su papel como puente entre diferentes regiones del Sur Global.
En un mundo marcado por la incertidumbre y la multipolaridad, el foro en Rabat y las reuniones bilaterales que lo acompañaron transmiten un mensaje claro: el diálogo parlamentario Sur-Sur se consolida como una herramienta indispensable para promover el desarrollo, la seguridad y la estabilidad internacional. La apuesta por la cooperación y la solidaridad entre países del Sur se presenta, no solo como una alternativa, sino como una necesidad para abordar los desafíos globales del siglo XXI.
30/04/2025









