
El Grupo Banco Mundial ha decidido suspender su cooperación con Túnez, después de que las declaraciones del presidente tunecino sobre los inmigrantes subsaharianos desencadenaran una ola de violencia racista.
En un memorando enviado al personal el domingo por la noche, el presidente del Banco Mundial, David Malpass, dijo que la institución financiera suspenderá el marco de asociación con Túnez, que establece programas futuros de 2023 a 2025, y pospondrá hasta nueva orden una reunión de su Directorio, prevista inicialmente para el 21 de marzo, para examinar esta nueva apuesta estratégica.
“La seguridad e inclusión de los migrantes y las minorías es parte de los valores centrales de nuestra institución de inclusión, respeto y antirracismo en todas sus formas”, subrayó.
“Los comentarios públicos que incitan a la discriminación, la agresión y la violencia racista son completamente inaceptables”, agregó el presidente del Banco Mundial.
El presidente tunecino, Kais Saied, anunció, en un discurso pronunciado el 21 de febrero, «medidas urgentes» contra la inmigración ilegal procedente del África subsahariana.
En este discurso denunciado por la Unión Africana y calificado de «racista» por las ONG, afirmó que la presencia de inmigrantes subsaharianos en Túnez era fuente de «violencia, crímenes y actos inaceptables».
El Banco Mundial está trabajando para garantizar la seguridad de su personal en Túnez, y en particular del África subsahariana, incluso a través de medidas de seguridad adicionales.
Las medidas de seguridad podrían afectar la ejecución de los programas del Banco Mundial, pero “la seguridad del personal prevalecerá sobre las preocupaciones del programa”, se agrega.
07-03-2023









