
El Unión Marroquí del Trabajo (UMT), sindicato histórico en Marruecos, condenó las recientes detenciones de sindicalistas tunecinos.
“La UMT y la clase obrera marroquí siguen, con profundo descontento, el ataque sistemático contra la Unión General del Trabajo de Túnez, su dirección y dirigentes sindicales, y las restricciones a las libertades sindicales llevadas a cabo por el presidente tunecino Kaïs Saïed”, indica el secretario general de la UMT, Miloudi moukharik, en una carta de solidaridad dirigida a su homólogo de la UGTT, Noureddine Taboubi.
Estos comportamientos son “ataques a las libertades sindicales reconocidas por las cartas de las Naciones Unidas y estipuladas en los convenios internacionales de la Organización Internacional del Trabajo en Ginebra (…) Reflejan las malas intenciones del régimen en su empeño por domesticar el trabajo sindical independiente encarnado por el Sindicato General del Trabajo de Túnez», destaca Moukharik.
Ante esta escalada por parte del presidente Saïed, la UMT pide la celebración de «una reunión extraordinaria del Consejo General de la Confederación Árabe de Sindicatos en Jordania para examinar esta situación y tomar todas las iniciativas de solidaridad con los tunecinos».
Esta nueva expresión de solidaridad con los tunecinos forma parte de una larga tradición que se remonta a los años cincuenta del siglo pasado. De hecho, tras el asesinato del líder sindical tunecino Farhat Hachad, el 8 de diciembre de 1952, la UMT respondió organizando una huelga general en Casablanca. Una secuencia de la historia común entre Marruecos y Túnez que Miloudi Moukharik quiso recordar, en su carta, a Taboubi.
23-02-2023