
El Parlamento de Marruecos rechazó unánimemente el lunes 23 de enero las acusaciones «falsas» de los diputados europeos y toda «injerencia» en los asuntos del Reino, en respuesta a una resolución del Parlamento Europeo que expresaba su preocupación por el deterioro de la libertad de prensa en el país.
Las dos cámaras del Parlamento se reunieron en el Pleno de Rabat para «evaluar» la resolución del Parlamento Europeo (PE), que también expresó su preocupación por las acusaciones de corrupción que pesan sobre el país.
Las «decisiones no nos van a intimidar y no vamos a cambiar nuestra trayectoria y nuestros enfoques», declaró Mohamed Ghiat, presidente del grupo de la Agrupación Nacional de Independientes (RNI), el principal partido de la mayoría.
La resolución del PE es «un intento desesperado de influir en la justicia marroquí independiente» y una «violación de la soberanía de un país socio», añadió Ahmed Touizi, del Partido Autenticidad y Modernidad (PAM), otra formación de la coalición gubernamental.
El organismo dijo que tomó nota «con gran asombro e indignación de esta resolución, que completó los niveles de confianza entre las instituciones legislativas marroquíes y europeas, y se refirió al progreso positivo cuya realización tomó varias décadas».
El hemiciclo condenó, en este sentido, «los intentos hostiles encaminados a dañar los intereses y la imagen de Marruecos, así como las distinguidas y duraderas relaciones entre Marruecos y la Unión Europea, que se basan en valores, principios e intereses comunes». También ve la resolución reciente como «una transgresión inaceptable de su jurisdicción y poderes, y una intrusión inaceptable en la soberanía de Marruecos y la santidad e independencia de sus instituciones judiciales».
24-01-2023