He aquí la segunda parte de la entrevista con la novelista marroquí que escribe en Catalán Laila Karrouch. Para consultar la primera parte se ruega pinchar aquí.
P: Además de enfermera y escritora, usted ejerce una tercera labor, la de traducir. ¿Cómo ha sido la tarea de la autotraducción al castellano con el fin de adaptar su obra al contexto hispánico más amplio? ¿Qué tal ha sido la recepción de su obra traducida al español?
R: Hay muchos escritores que me dicen: ¨para mi es una frustración traducir mi propia obra¨, pero yo he disfrutado mucho traduciéndola. Sólo, cuando dejas pasar mucho tiempo, los personajes maduran en tu mente y quieren coger otro camino, por ello hay que hacer la traducción de inmediato para que los personajes no se vayan mucho y tú te quedes bastante fiel al texto original sino acabas cambiando todo el texto. no niego que había tentaciones, porque he añadido cosas que no llegan a ser un capítulo.
P: ¿Desea usted ver en el futuro sus obras en otras lenguas? ¿Cuál será el primer idioma al que prefieras verter su creación literaria? ¿Cuál será la obra que más quieras ver en esta lengua?
R: Me gustaría ver la obra Laila en árabe. Me encantaría
P: Teniendo como protagonistas ¨la dona inmigrant¨ y ¨la filla extranjera¨, usted trata temas relacionadas con el ámbito social de la mujer, desde el matrimonio y la maternidad hasta el ateísmo y la virginidad pasando por el leitmotiv del amor y la muerte. ¿Qué otros temas Laila anhelaba poder tratar y aún no lo hizo? ¿Por qué?
R: Hay un tema que me gustaría tocar y estoy en ello que es la homosexualidad porque me gustaría que mi país hablase de temas que son considerados tabú porque creo que Marruecos es el país que me ha sorprendido a nivel de cambios y si los escritores expresamos nuestras preocupaciones podemos no solucionar el mundo, pero al menos expresar sus problemáticas.
P: Su literatura sencilla, sensible y a veces conmovedora, si fuera un regalo ¿a qué categoría de lectores la ofrecería en exclusiva? ¿Por qué?
R: La ofrecería a todas ¨ las ¨Samiras¨ que hay tanto en España como en Marruecos y otras partes del mundo, porque hay muchas que viven sus historias en secreto y sufren a escondidas porque nadie las puede entender. Creo que sufrir así renunciando al amor cuando tienes 20 o 25 años es muy duro porque en el momento de enamorarte de alguien no puedes enamorarte de otro y estás condenada vivir sin amor y vivir sin estar viva.

P: El uso de fragmentos del sagrado Corán en su texto literario como es el caso de Que Allah me perdone no es un mero adorno, claro, ¿qué mensaje quería transmitir mediante este estilo?
R: El uso de fragmentos del Corán va muy relacionados con el personaje. No lo quería jugar porque tocar la religión o la política es poner el dedo en la llaga. Siempre son temas problemáticos, por eso he optado por ir a párrafos copiados sin crear una confusión y hacer que lo diga un personaje que puede equivocar.
P: Tras haber recomendado De Nador a Vic como lectura obligatoria en muchos institutos de Cataluña, ¿Karrouch consiguió, así, vencer esa extranjería que le invadía en la infancia? ¿Cómo vive este éxito como mujer rifeña?
R: Lo vivo con mucha naturalidad. Creo que he tenido la gran suerte de poder publicar el libro en un momento muy importante y llevamos 20 años y todavía se vende el libro. Los primeros niños que empezaron a leerlo con 14-15 años ahora tienen 35-35 años. La historia es la misma y es un libro fresco que no ha pasado de moda. Eso me hace sentir muy especial como persona. Como escritora me siento defraudada por el hecho de haber tardado tanto en escribir otras obras. Mi lucha continua todos los días es el tiempo.
De esa extranjería, me curé cuando precisamente hice la segunda ronda de emigración. Cuando emigré hace cinco años para instalarme en Toulouse me di cuenta de que cuanto más emigrante eres más libre te sientes sin ser atada a ningún sitio sino como un pájaro capaz de construir su nido en cualquier sitio.
P: En su libro Un meravellós llibre de contes àrabs per a nens i nenes (2006) ha explorado el mundo de la fábula, así como ha probado su pluma en otro género literario que es el cuento. ¿Cree que el escritor como intelectual ha de comprometerse a defender e incluso rescatar el patrimonio literario oral de su nación de la fatalidad del olvido?
R: Yo no lo veo como un compromiso sino como un regalo el volver a mi infancia y recuperar gran parte de ella. Escribir con la propia percepción de una niña para hacer llegar al lector el mundo de una niña en Marruecos en los años 70-80 en una zona rural. Creo que no es una obligación sino un premio para mí.
P: Si no fuera escritora de la narrativa ¿qué otro género artístico elegiría Laila Karrouch para dejar su huella en el campo de la creatividad humana?
R: Antes de empezar à escribir había comenzado a pintar. Esta parte artística es la que siempre me ha encantado y la tengo guardada para cuando me jubile.
Muchas gracias Laila Karroch por dejar su huella positiva en el mundo de las letras, a por más.
Por: Khadija TAOUIL – Doctoranda en el Laboratorio de Marruecos y el Mundo Ibérico e Iberoamericano, Universidad Hassan II, Casablanca
30-09-2022