
“Sin harina, azúcar o mantequilla, no podemos trabajar”. Radhia Kamoun, jefa de una cadena de pastelería, lucha por abastecer de materias primas a su fábrica en Túnez, que sufre escasez de alimentos.
«Cuando comenzó la escasez, comenzamos a usar menos azúcar y café en nuestros pasteles, pero no podemos prescindir de la mantequilla», dijo la Kamoun, directora ejecutiva de Gourmandise, una marca que tiene 26 tiendas en Túnez y emplea a más de 600 personas.
Para elaborar sus tartas, la empresa normalmente necesita tres toneladas de azúcar a la semana, cuatro toneladas de mantequilla y entre siete y ocho toneladas de harina, productos que se han vuelto muy difíciles de conseguir en los últimos meses en un país golpeado por un serio problema financiero.
El presidente tunecino, Kais Saied, ha prometido tomar medidas enérgicas contra los «especuladores» a los que atribuye estas carencias, la situación no ha mejorado.
A menudo, cuando un producto que faltaba reaparece en los estantes, otros desaparecen. En los últimos días, el café, la leche y el azúcar no se encuentran en las tiendas o se venden en cantidades muy pequeñas.
«A nuestro nivel, no podemos hacer nada, no podemos importar azúcar, café o harina porque son monopolios estatales», explica la Kamoun, en declaraciones a la AFP.
Por otro lado, Gourmandise ha tenido que subir dos veces sus precios desde principios de año ante el aumento de los precios de las materias primas, subraya.
Desde hace varias semanas, en el suburbio de Ben Arous, al sur de Túnez, todos los días se forma una fila de furgonetas frente a la fábrica de la Compañía de Fabricación de Bebidas de Túnez (SFBT), que embotella Coca-Cola y Boga en particular, la soda nacional. Debido a la falta de cantidades suficientes de azúcar, la fábrica está paralizada y las camionetas de distribución tienen que esperar horas para cargar las cajas de refrescos.
La fábrica, que emplea a unos 600 trabajadores, puso a decenas en paro técnico durante unos días en agosto antes de reincorporarlos después de las protestas.
«Empezamos a sentir este problema a finales de junio con una gran escasez de cantidades de azúcar que nos puso a disposición la Oficina de Comercio», explica a la AFP Souheil Boukhris, representante sindical de la fábrica.
“Solo escuchamos promesas. Es para hoy. Es para mañana, pasado mañana, etc. Te puedo decir que esta situación y estas promesas se escuchan desde junio”, concluye la misma fuente.
08-09-2022