
La Confederación Democrática del Trabajo (CDT) dirigió acusaciones directas al actual Gobierno marroquí de estar involucrado en la crisis del alza de precios, citando su falta de acción para reducir los precios del combustible.
La Confederación consideró que el poder adquisitivo del ciudadano marroquí se ha erosionado debido al elevado endeudamiento de las familias para hacer frente al coste de la vida, y a la continua acumulación de beneficios del lobby de los combustibles vaciando los bolsillos de los ciudadanos, constatando la ausencia de cualquier iniciativa por parte del Gobierno y el resto de las instituciones constitucionales relacionadas con el control de precios y la competencia, para hacer frente a esta situación.
La misma fuente afirmó que la falta de intervención del Gobierno para frenar la ola de precios altos y la continuación de la presión sobre el poder adquisitivo amenaza la seguridad social, culpando al Gobierno de las consecuencias de esta situación, y pidió al Consejo de la Competencia que resuelva el tema del combustible que le ha sido transferido desde 2016.
La CDT consideró que la reactivación de la refinería «La Samir» representa una urgente necesidad nacional, resaltó la prioridad de tomar medidas prácticas en lugar de conformarse con declaraciones ambiguas, y también llamó a la «unidad de lucha para enfrentar la usurpación del capital monopolista rentista en Marruecos, y para defender los logros sociales y de derechos humanos».
La medida del Sindicato se produce en un momento en el que aumenta la ira contra el actual Gobierno y su jefe, debido a los precios récord de la gasolina y el diésel, incluso tras la caída de los precios del petróleo en el mercado internacional.
25-07-2022