
Desde el lunes, y tras un fin de semana muy revuelto, los Marroquíes Residentes en el Extranjero (MRE) que llegan a Ceuta con sus vehículos para entrar en Marruecos, no pasan más de tres horas en la zona de espera antes de cruzar la frontera.
El flujo de los MRE fue particularmente importante el pasado fin de semana, alcanzando «un récord histórico», según la Delegación del Gobierno en Ceuta. En total, 10.200 vehículos y 40.000 MRE entraron en la ciudad desde Algeciras con destino a Marruecos, entre el viernes y el domingo, lo que supone un incremento del 128% para MRE y del 181% para vehículos respecto a 2019, último año en que se organizó la Operación Marhaba.
La lentitud constatada en la frontera de Tarajal se debe a los «estrictos» controles documentales y sanitarios realizados a ambos lados de la frontera, ha explicado la Delegación del Gobierno, que ha subrayado que el tráfico se ha mantenido «entre 100 y 150 coches por hora».
Para hacer frente al monstruoso embotellamiento registrado en los últimos días en la zona de espera, el presidente de la ciudad, Juan Vivas, implementó desde el lunes varias medidas. Así, se han repartido bolsas de agua y alimentos a los MRE, y se ha desplegado una unidad de Cruz Roja y agentes de seguridad privada en los lugares donde también se instalarán lonas para combatir el calor. Durante el pasado fin de semana, varias asociaciones hicieron también esta labor.
Según las autoridades, las aglomeraciones son elevadas en Ceuta debido a los bajos precios que cobra la naviera que hace el trayecto marítimo Algeciras-Ceuta y la celebración de Eid Al Adha prevista para el próximo domingo en Marruecos.
06-07-2022