
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, estará este jueves en Marruecos donde mantendrá una reunión con el Rey Mohammed VI. El tema migratorio, la integridad territorial de España (Ceuta y Melilla), la reapertura de fronteras, la reanudación de la Operación Marhaba (Paso del Estrecho) y muchos otros temas estarán en el menú de debate.
La visita de Pedro Sánchez a Rabat supone el primer paso oficial en la reanudación de las relaciones entre España y Marruecos tras un año de crisis diplomática. En una carta del presidente Sánchez expresó al Rey Mohammed VI su apoyo al plan marroquí de autonomía del Sáhara, poniendo así fin a una crisis que se ha vuelto «insostenible» para España. Sin embargo, persisten varias fuentes de posibles conflictos entre los dos países y, sin duda, estarán en el centro de los intercambios entre Sánchez y el monarca marroquí.
Primero, la reapertura de fronteras. Marruecos mantiene cerradas sus fronteras con Ceuta y Melilla desde el inicio de la pandemia, que ha afectado gravemente a la economía de las dos ciudades y de las ciudades marroquíes limítrofes. España quiere una reapertura «controlada» de las fronteras para que se restablezca la libre circulación de personas y mercancías entre ambos países. También se negociará la reapertura de las fronteras marítimas, con la reanudación de la Operación Marhaba, cancelada en 2020 y 2021, para permitir el paso de marroquíes procedentes de Europa por los puertos de Algeciras, Almería y Tarifa para llegar a Marruecos durante estas vacaciones de verano.
Las reivindicaciones de Marruecos sobre Ceuta y Melilla también estarán en el centro de los debates. En su nueva estrategia de seguridad nacional, España ya ha previsto el establecimiento de un plan integral de seguridad para las dos ciudades. Pero teme que Marruecos siga reclamando las dos ciudades, sobre todo cuando haya obtenido el reconocimiento total sobre el Sáhara. Por ello, Pedro Sánchez, en su carta insistía en la «integridad territorial» de los dos países, subrayando la necesidad de afrontar «juntos retos comunes, en particular la gestión de los flujos migratorios en el Mediterráneo y el Atlántico, en un espíritu de colaboración total”.
Pedro Sánchez ya no quiere revivir las afluencias masivas de inmigrantes a Ceuta como las registradas el pasado mes de mayo, ni los asaltos agresivos de inmigrantes subsaharianos en Melilla como las vividas a principios de marzo. “Nuestro objetivo es construir una nueva relación, basada en la transparencia y la comunicación permanente, el respeto mutuo y los acuerdos firmados por ambas partes y absteniéndose de cualquier acción unilateral…”, indicó en su carta a Mohammad VI.
Queda por esperar que estos intercambios conduzcan a buenas resoluciones y restablecer los fuertes lazos con los dos países hermanos.
06-04-2022