28-01-2022
Ante el déficit hídrico de las cuencas de Moulouya, Oum Er Rbia y Tensift, el Ministro de Equipamiento y Agua, Nizar Baraka, acaba de lanzar un plan de emergencia 2021-2022 presupuestado en 2,42 mil millones de dirhams (MMDH). Fouad Amraoui, experto en agua, analiza la situación actual.
“El suministro de agua depende de las lluvias y actualmente estamos experimentando un tercer año consecutivo de sequía. Hay menos suministro de agua y la tasa de llenado de las presas es la más baja. En Marruecos, hay una falta de lluvia cada año durante un período de cuatro a siete meses. Sin embargo, siempre existe la necesidad de reservas para satisfacer las necesidades de la población, ya sea de agua potable o de riego», dice Fouad Amraoui, profesor-investigador de hidrología en la Universidad Hassan-II de Casablanca y presidente de la «Asociación de Investigación Acción para el Desarrollo Sostenible».
Fouad Amraoui agregó: “Tenemos 1,5 millones de hectáreas regadas de represas y cuando se quedan sin agua, la gente va a abastecerse de las aguas subterráneas. Esto provoca una sobreexplotación de los acuíferos que, por tanto, sufren un déficit importante, por lo que es una situación un tanto crítica”.
Generalmente, las zonas más afectadas por la falta de agua son siempre las ubicadas entre Casablanca y el Sur, explica el especialista. “En el nivel norte, a menudo tienen mucha más lluvia. La distribución desigual del agua a escala nacional es un problema. Cuando quieres desarrollar un país, tienes que tener agua en todas partes porque es un factor limitante para el desarrollo. La falta de agua tiene importantes consecuencias socioeconómicas como tensiones sociales, baja producción agrícola, éxodo a las ciudades, etc… continúa Amraoui.
Marruecos experimentó una caída del 59% en las entradas de agua en 2020-2021. La cuenca de Moulouya (Oriental) registró una tasa de llenado de solo el 11% y la de Tensift del 34%. Ante esta alarmante observación, el Ministro de Equipamiento y Agua, Nizar Baraka, acaba de lanzar un plan de emergencia 2021-2022 presupuestado en 2.420 millones de dirhams (MMDH).
“Si no llueve, el problema persistirá a pesar del plan de emergencia”
Objetivo: garantizar el suministro de agua potable en las mencionadas cuencas hidráulicas y en el Oum Er Rbia. Este plan de emergencia incluye, en particular, la construcción de 120 presas en las laderas para 2024. “Esta inversión es una condición necesaria pero no suficiente. Ciertamente necesitamos fondos, pero incluso si construimos todas esas presas, si no llueve, el problema persistirá ”, indica Amraoui.
Esta situación se debe, por una parte, al cambio climático y a la disminución de las precipitaciones y, por otra, al retraso en la aplicación de la estrategia nacional del agua, explicó el Ministro, precisando que a finales de 2018 debía realizarse una estación de desalinización de agua en Saidia (Oriental), con el fin de garantizar el abastecimiento de agua a la población de Nador Driouch y Saidia.
En la misma línea, anunció la puesta en marcha en las próximas semanas del gran proyecto de desalinización de agua en Casablanca de 300 Mm3.
La desalinización del agua es una solución preferida, especialmente para Marruecos, cuya costa se extiende a lo largo de 3.500 km. “La desalinización es una obligación, ya no es una elección. Todas las ciudades costeras deben ser atendidas desde la desalinización de agua de mar, sobre todo porque la tecnología ha evolucionado mucho y los precios han bajado un poco. El problema es que lleva tiempo”, agrega Fouad Amraoui. “La desaladora de Casablanca no estará lista hasta 2027. Hay que acelerar el proceso”.
La reutilización de aguas residuales también es un componente importante de la estrategia. “Hoy en día, prácticamente todas las grandes ciudades de Marruecos tienen plantas depuradoras de aguas residuales, pero no basta con tratar esta agua, también hay que reutilizarla para el riego de espacios verdes, a veces para la industria como es el caso de Juribga por parte de la OCP. Todo lo que es posible hacer está contenido en el plan nacional 2020-2027”, detalla Amraoui.
El experto también destaca la importancia de concienciar a la ciudadanía sobre el principio del ahorro del agua, desde el ciudadano al agricultor, al industrial, etc., especialmente en épocas de escasez. “Todo lo que se pueda hacer, hay que hacerlo porque corremos el riesgo de tener un año complicado”, advierte.