18-01-2022
“Okdiario” desveló que el Gobierno de España ha descartado abrir las fronteras de Ceuta y Melilla con Marruecos, antes del próximo mes de mayo o junio, debido a la actual situación epidemiológica.
El periódico, citando a la delegada del Gobierno en Ceuta, Salvadora Mateos, que afirmó que en las condiciones epidemiológicas que presenta la sexta ola de la pandemia en la ciudad es imposible pensar en reabrir las fronteras, declarando que: “No será posible, al menos hasta mayo o junio, cuando se espera que concluya la tercera fase de reforma del paso para dotarlo de sistemas de control inteligentes».
Mateos advirtió, que «en las condiciones sanitarias actuales no se puede abrir la frontera y mientras no mejoren no se va a hacer», avisando sobre el crecimiento continuo de la incidencia acumulada de nuevos positivos diagnosticados a 14 días en la ciudad.
La misma fuente agregó que el Ministerio del Interior pretende iniciar “en los próximos días” la ejecución de la tercera fase de las obras de reparación del puesto fronterizo, del que «ya se han suprimido los pasillos enrejados que antes utilizaban los porteadores, mejorado las dependencias de la Guardia Civil y habilitado nuevos puntos para la tramitación de solicitudes de protección internacional».
Señaló que la pandemia convenció a España de su necesidad de otras fronteras inteligentes y añadió: “Cuando se pueda reabrir, la idea es que las primeras personas que puedan entrar por ella sean trabajadores transfronterizos, que puedan entrar y salir a diario, como hacían antes”, en referencia a los marroquíes empleados en la ciudad, que hasta ahora siguen atrapados en Ceuta y Melilla.
La delegado del Gobierno admitió que Marruecos “no respondió a ninguna de las 700 solicitudes de informes sociales sobre la situación de las familias de los menores no acompañados varados en la ciudad de Ceuta, lo que de hecho impide iniciar cualquier intento de devolverlos al Reino, de conformidad con el reglamento de la ley de extranjería”, luego de que el Poder Judicial hubiera suspendido previamente dichas operaciones por violar la ley.
Destacó que “Marruecos nunca responde a las solicitudes presentadas por las ciudades autónomas, pero se está trabajando en ello”, y añadió: “Actualmente no hay quejas sobre su cooperación en temas de control de inmigración, como lo demuestra el despliegue de fuerzas marroquíes en la frontera para evitar un intento de entrada irregular a las dos ciudades durante la Navidad, cuando se impidió el paso a unas 1.000 personas”.