02-11-2021
Argelia ha decidido poner fin al contrato del gasoducto Magreb Europa (GME), que atraviesa territorio marroquí, para transportar gas argelino a España. Argelia abastecerá ahora a los mercados español y portugués únicamente a través del gasoducto Medgaz, que conectará Beni-Saf (Ain Témouchent, oeste del país) con Almería (sur de España).
El contrato de GME finalizó el domingo 31 de octubre de 2021 a la medianoche y Argelia ha decidido no renovarlo. La noticia fue anunciada por el presidente de la República, Abdelmadjid Tebboune, quien ordenó a Sonatrach que rescindiera el contrato entre ésta y la oficina marroquí de luz y agua potable (ONEE).
El experto en energía y exministro de energía argelino, Abdelmadjid Attar, habló sobre la capacidad de Argelia para abastecer a los mercados español y portugués a través del Medgaz y el abandono del gasoducto Magreb Europa.
El exministro de Energía indicó, en una entrevista con la agencia argelina APS, que Argelia es «técnicamente» capaz de garantizar, a partir de ayer lunes, todas sus entregas de gas a España a través del gasoducto Medgaz y los transportistas de GNL, tras la decisión de no renovar el contrato del GME. “Medgaz puede hacerse cargo de todas las entregas gracias a la creación de capacidad prevista de 10,5 mil millones de m3 por año, pero compensando el diferencial con las entregas de GNL”, explicó Attar.
De hecho, el Gasoducto Magreb-Europa (GME) tenía una capacidad de alrededor de 13 mil millones de metros cúbicos (m3) por año. Pero durante unos años se había explotado con un volumen anual que no superaba los 4 a 6 mil millones de m3 / año, mientras que Medgaz transportaba 8.5 mil millones de m3 al año. Estos volúmenes de gas, además de los suministros a Marruecos de entre 600 y 800 millones de m3 anuales, se entregaron a los mercados español y portugués.
Sobre las dificultades de este reto, Attar subraya, en este sentido, que Sonatrach y sus clientes estaban «ciertamente» trabajando en soluciones para afrontar los retos relacionados con el aumento de la demanda en invierno que podría superar las capacidades diarias de Medgaz, y la disponibilidad de los transportistas de GNL requeridos y el de las capacidades de regasificación en las costas españolas.
De hecho, Sonatrach debe, a medio y largo plazo, «luchar y gestionar perfectamente esta situación para proteger su mercado español y portugués de la competencia con otros proveedores que también están atentos a este mercado», concluyó la misma fuente.