30-06-2021
Los socialistas, según afirmó el miércoles el presidente de Gobierno español Pedro Sánchez, no aceptarán «nunca» un referéndum de autodeterminación en Cataluña, una reivindicación central de los separatistas catalanes con los que Madrid debe reanudar en septiembre sus negociaciones.
Sánchez declaró, en este sentido, en la Cámara de Diputados que «no habrá referéndum de autodeterminación», asegurando que el Partido Socialista, del que es secretario general, «nunca aceptará este tipo de deriva». Subrayó, en efecto, que «para poder organizarse un referéndum de autodeterminación, sería necesario que sus defensores logren convencer a los 3/5 de esta Cámara para llegar a modificar el artículo 2 de la Constitución española; y que luego los españoles ratifiquen esta modificación a través de un referéndum».
Una reforma de este tipo de la Constitución es imposible de realizarse porque las tres primeras fuerzas políticas de la Cámara (socialistas, conservadores del Partido Popular y extrema derecha de Vox) se oponen a ella.
Estas declaraciones de Pedro Sánchez intervinieron tras su primer encuentro oficial con el nuevo presidente regional catalán, el independentista Pere Aragonès. Este último anunció al final de este encuentro que el diálogo entre Madrid y los separatistas catalanes, destinado a encontrar una salida a la crisis en Cataluña, se reanudaría durante la tercera semana de septiembre. Los independentistas tienen como principal reivindicación la celebración de un referéndum de autodeterminación en esta rica región del noreste de España, poblada por 7,8 millones de habitantes.
En octubre de 2017, el Gobierno regional de Carles Puigdemont organizó un referéndum, a pesar de la oposición del Gobierno central y su prohibición judicial, seguido unas semanas más tarde por una declaración unilateral de independencia.
El Eobierno español, siendo en manos de los conservadores, había reaccionado destituyendo al Gobierno regional y poniendo la región bajo tutela. Este intento de secesión fue una de las peores crisis políticas que ha vivido España desde el final de la dictadura franquista en 1975.
En un gesto de «reconciliación», el Gobierno de Pedro Sánchez indultó la semana pasada a los nueve dirigentes independentistas que habían sido condenados a penas de 9 a 13 años de prisión por su papel en este intento de secesión.