
12-01-2021
«Dada la importancia social y económica de los sectores de la restauración, en la generación de empleo y oportunidades de inversión y su importante papel en el estímulo del consumo nacional, se demanda la inclusión de los sectores de restauración dentro del Programa Nacional de Recuperación Económica, con el fin de salvaguardar las ganancias y el atractivo de los sectores de restauración», afirmó un comunicado de la Confederación Marroquí de Profesiones de la Restauración.
A través de este comunicado, propietarios del sector pidieron realizar una reunión urgente con el Comité de Vigilancia Económica, el Ministerio de Industria y Comercio, Economía Verde y Digital, la Unión General de Empresas Marroquíes y las Cámaras de Comercio, Industria y Servicios de Marruecos, para tomar decisiones y llegar a soluciones que superen la mayor crisis nacional dentro del sector de la restauración.
En la actualidad, el sector de restauración representados por más de 100.000 profesionales y empresas de diversos tamaños y especializaciones, y con una capacidad operativa de más de 1.200.000 puestos de trabajo directos, presenciaron una disminución en su número de transacciones para el año 2020, que van del 35 al 95 por ciento, como tasa de disminución según cada sector, lo que representa un aumento de la tasa de déficit de más del 50 por ciento.
Asimismo, esta circunstancia e indicadores llevaron a la pérdida de un porcentaje notable de puestos de trabajo, y a la disminución casi total de la inversión o reinversión en el sector de la restauración.
Esta misma fuente indicó que todos los componentes de la Confederación valoran las medidas tomadas por el Comité de Vigilancia Económica durante su última reunión, con el fin de preservar y resguardar puestos de trabajo en el ámbito de la restauración.
La Confederación Marroquí de Profesiones de la Restauración también recuerda a través del este comunicado, la difícil situación económica que siguen viviendo los profesionales del sector de la restauración debido a la apuesta por un paquete de medidas preventivas impuestas por profesionales de estos sectores, entre ellas (cierre, reducción de jornada, reducción de la capacidad en los locales…), en paralelo con la obligación de cumplir con sus obligaciones de gestión y contratos (costes de alquiler, salarios, cuotas de seguridad social, tasas e impuestos, préstamos bancarios …).
Al respecto, se indico que a partir de los resultados inmediatos de la situación en la que viven ahora los sectores de la restauración conllevó a la quiebra de numerosos profesionales y trabajadores en el sector debido al alto nivel de endeudamiento con empresas y profesionales, y la incapacidad económica de cumplir con sus obligaciones.
Para superar esta difícil situación, la Confederación busca desde el Comité de Vigilancia Económica, tomar medidas urgentes y concretas para limitar el sangramiento económico y permitir la práctica de la actividad sin restricciones.