El Club de Abogados de Marruecos ha llevado a los tribunales turcos a la activista Tawakkol Karman, acusándola de difundir mensajes en redes sociales que podrían incitar a la violencia y a la rebelión contra el Reino de Marruecos y sus instituciones. La acción judicial refleja una estrategia legal rigurosa en el marco del derecho penal turco, más que un enfrentamiento político directo.
Según el comunicado del colectivo, presidido por Me Mourad Elajouti, las publicaciones de Karman en X (antes Twitter) contienen expresiones como “intifada marroquí” o “purificación por la sangre”, calificadas de incitación explícita a la sublevación. Los abogados sostienen que estos mensajes no se amparan en la libertad de expresión, sino que constituyen discursos de incitación directa al terrorismo, contemplados y sancionados por la legislación turca sobre seguridad nacional.
La denuncia se fundamenta en artículos específicos del Código Penal turco, entre ellos el 216, 312 y 314, que abarcan desde la incitación pública al odio hasta la participación en organizaciones terroristas. Además, se invoca el artículo 340, que protege a jefes de Estado extranjeros frente a injurias públicas, lo que refuerza la dimensión diplomática de la medida. La acción también se articula con la Ley antiterrorista turca (n.º 3713), conocida por su rigor y cuya aplicación ha sido avalada por instancias internacionales, como la Corte Europea de Derechos Humanos en el caso Recep Özdemir c. Turquía (2020).
En declaraciones, Me Elajouti subrayó el carácter estrictamente jurídico de la denuncia, enfatizando que la iniciativa responde a un marco de cooperación legal entre Marruecos y Turquía en la lucha contra el terrorismo y la propagación de ideologías violentas, desligándola de cualquier motivación política.
Entre las medidas solicitadas al fiscal turco figuran la apertura de una investigación penal por incitación al terrorismo, injuria agravada y alteración del orden público, la citación de Karman ante las autoridades competentes, la incautación de los contenidos digitales incriminados y, de ser necesario, su detención durante una estancia en Turquía. Asimismo, el Club de Abogados demanda que se adopten todas las disposiciones necesarias para garantizar la investigación de los hechos conforme a los artículos 134 y 160 del Código de Procedimiento Penal turco.
Esta acción legal refleja una estrategia de Marruecos para utilizar mecanismos judiciales internacionales como herramienta de protección de su soberanía frente a discursos considerados como amenazas externas. Al mismo tiempo, evidencia cómo el derecho penal turco se ha convertido en un recurso para abordar casos de incitación a la violencia con repercusiones diplomáticas, subrayando la interconexión entre legislación interna y relaciones internacionales.
27/10/2025









