El Frente Polisario ha rechazado enérgicamente el nuevo proyecto de resolución presentado por Estados Unidos ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que califica el plan de autonomía marroquí de “la base más creíble” para resolver el tema del Sáhara. El texto, filtrado el 22 de octubre, consolida el respaldo internacional a la propuesta presentada por Marruecos en 2007 y marca un nuevo apoyo desde Washington, que busca acelerar una salida política al prolongado diferendo.
En una carta dirigida al representante permanente de Rusia ante la ONU, Vassily Nebenzia, el Frente Polisario denunció lo que considera un “grave desvío” en el tratamiento del caso saharaui. El grupo sostiene que el proyecto estadounidense “socava los fundamentos del proceso de paz” y constituye una “violación del estatuto internacional” del territorio, advirtiendo que, si se adopta el texto en su forma actual, no participará en ningún proceso político basado en esos parámetros.
El documento norteamericano representa una ruptura con las resoluciones anteriores del Consejo de Seguridad, al establecer plazos concretos y reconocer explícitamente la propuesta marroquí como marco único de negociación. También reafirma el liderazgo estadounidense, bajo la administración de Donald Trump, en el impulso de un acuerdo entre Marruecos y Argelia, y abre la posibilidad de que las futuras conversaciones se celebren en territorio estadounidense, bajo la coordinación del enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura.
El Consejo de Seguridad tiene previsto votar la resolución en los próximos días, probablemente antes del 31 de octubre de 2025, fecha de expiración del mandato de la MINURSO. Si se aprueba sin modificaciones, el texto consolidará aún más la posición del plan de autonomía marroquí como marco central de las negociaciones futuras.
Mientras tanto, para Marruecos, el respaldo de Washington y de otros países como Bélgica y Reino Unido refuerza su posición diplomática y consolida su estrategia de presentar el plan de autonomía como la única opción realista, seria y viable. Rabat percibe este apoyo como una victoria política que confirma la eficacia de su diplomacia y su visión pragmática de una solución duradera bajo soberanía marroquí.
Por el contrario, el Polisario y Argelia se encuentran en una posición cada vez más debilitada. Las recientes declaraciones de Moscú, que ha reconocido la autonomía como una “forma de autodeterminación”, y la adhesión de países europeos al enfoque marroquí, han aislado a Argel. A la vez que el equilibrio diplomático parece inclinarse hacia Marruecos, en un contexto donde la comunidad internacional se alinea progresivamente con su propuesta política para cerrar medio siglo de conflicto.
25/10/2025









