Durante la jornada de hoy, el Rey Mohammed VI, presidió este en el Palacio Real de Rabat un Consejo de Ministros decisivo, centrado en la revisión de las orientaciones generales del Proyecto de Ley de Finanzas 2026. La reunión abordó también amplias reformas institucionales, proyectos de ley orgánicos, acuerdos internacionales y nombramientos en altos cargos del Estado, reflejando la continuidad de una gobernanza orientada al desarrollo equilibrado, la justicia social y la modernización institucional.
Durante la sesión, la ministra de Economía y Finanzas presentó las grandes líneas del presupuesto para 2026, elaborado conforme a las Instrucciones Reales y los discursos del Trono y de apertura del año legislativo. Este proyecto llega en un contexto internacional marcado por la incertidumbre, pero con indicadores nacionales favorables: una previsión de crecimiento del 4,8 %, una inflación controlada en 1,1 % y un déficit público reducido al 3,5 % del PIB. La estrategia económica busca consolidar los logros del Reino en materia de estabilidad macroeconómica y proyección internacional, mientras impulsa políticas sociales más inclusivas.
El proyecto presupuestario se articula en cuatro ejes estratégicos. El primero refuerza los logros económicos mediante el estímulo de la inversión privada, nacional y extranjera, la implementación de la nueva Carta de Inversión, el despliegue de la oferta nacional de hidrógeno verde y el fortalecimiento de las alianzas público-privadas. Se pone especial énfasis en las pequeñas y medianas empresas, esenciales para el empleo y la cohesión territorial, y se prioriza la inserción laboral de jóvenes y mujeres, así como el apoyo a los sectores rurales afectados por la sequía.
El segundo eje introduce una nueva generación de programas de desarrollo territorial integrado, basados en la regionalización avanzada y en la concertación con los actores locales. Se busca promover el empleo juvenil, reforzar los servicios públicos de educación y salud, y atender a las zonas más vulnerables, incluidas las montañosas, las oasis y los centros rurales emergentes. Este enfoque territorial pretende equilibrar las oportunidades y consolidar la solidaridad entre regiones.
El tercer eje, núcleo del modelo social marroquí, se centra en la sanidad y la educación, que recibirán un presupuesto récord de 140.000 millones de dirhams y 27.000 nuevos puestos. En el ámbito sanitario, se prevé la apertura de los hospitales universitarios de Agadir y El Aaiún, la finalización del complejo hospitalario Ibn Sina de Rabat y la construcción de nuevos centros en Beni Mellal, Guelmim y Errachidia, además de la rehabilitación de 90 hospitales. En educación, se acelerará la generalización del preescolar, la mejora de la calidad docente y el fortalecimiento del apoyo a la escolaridad. Estas medidas se acompañan de la extensión de la protección social, la generalización de la indemnización por pérdida de empleo y la ayuda directa a la vivienda, en beneficio de cuatro millones de hogares.
El cuarto eje apunta a consolidar las reformas estructurales y los equilibrios financieros del Estado. Incluye la revisión de la Ley Orgánica de Finanzas, la reforma de las empresas y establecimientos públicos, y la modernización del sistema judicial para reforzar la transparencia, la rendición de cuentas y la eficiencia administrativa.
En el plano institucional, el Consejo aprobó cuatro proyectos de leyes orgánicas. Los relativos a la Cámara de Representantes y a los partidos políticos buscan moralizar la vida pública, garantizar la integridad electoral y fomentar la participación de mujeres y jóvenes, con incentivos financieros que cubran hasta el 75 % de los gastos de campaña. Los otros dos textos precisan los mecanismos de la excepción de inconstitucionalidad y actualizan el funcionamiento de la Corte Constitucional, reforzando su eficacia y delimitando las competencias en materia de control electoral y designación de magistrados.
Asimismo, se aprobaron dos decretos en el ámbito militar: uno establece un nuevo estatuto para los funcionarios de la Dirección General de Seguridad de los Sistemas de Información, con el objetivo de atraer perfiles altamente cualificados; el otro reorganiza la Escuela Real del Servicio de Sanidad Militar y crea un Consejo de Investigación Científica encargado de definir sus prioridades.
En materia diplomática, el Consejo validó catorce acuerdos internacionales, de los cuales diez son bilaterales y cuatro multilaterales. Incluyen convenios sobre cooperación judicial, seguridad social, defensa, transporte aéreo y reconocimiento mutuo de permisos de conducir, además de la instalación en Marruecos de sedes de organismos africanos de control financiero y de consejos económicos y sociales.
Finalmente, en virtud del artículo 49 de la Constitución, el Rey Mohammed VI nombró nuevos walis y gobernadores en distintas regiones del Reino, entre ellos Khatib El Hebil (Marrakech-Safi), Khalid Aït Taleb (Fez-Mequinez) y Mhamed Atfaoui (Región Oriental). También designó a Tarik Senhaji como nuevo presidente de la Autoridad Marroquí del Mercado de Capitales, reflejando la voluntad de fortalecer la gobernanza económica y la supervisión del sistema financiero nacional.
Con esto, el Reino reafirma su orientación estratégica hacia un modelo de desarrollo equilibrado, en el que la inversión social y la modernización institucional se conjugan con la estabilidad económica y la apertura internacional.
19/10/2025