El gobierno español ha dado un paso adelante en respuesta a las restricciones impuestas por Israel a la entrada de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza. Con el envío de más de 12 toneladas de alimentos —unas 5.000 raciones—, España busca paliar, aunque sea mínimamente, la grave crisis alimentaria que azota al enclave palestino. Esta ayuda, que beneficiará a aproximadamente 10.000 personas, ha sido canalizada a través de Jordania y será distribuida en Gaza mediante el lanzamiento aéreo de 24 paracaídas.
La situación sobre el terreno es dramática. En la Franja, la hambruna se ha convertido en una constante. Miles de niños, incluidos recién nacidos, enfrentan un riesgo inminente de muerte por desnutrición. “Cerca de 40.000 bebés y 100.000 menores están en peligro. Que un niño muera de hambre en pleno siglo XXI es inadmisible”, señala el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.
El conflicto también ha dejado una estela de violencia en los centros de reparto de ayuda. Civiles palestinos han sido atacados mientras intentaban acceder a alimentos, en un contexto de bloqueo total, mercados vacíos y precios fuera del alcance de la población.
Desde el inicio de la ofensiva israelí el 7 de octubre de 2023, la cifra de víctimas mortales en Gaza supera ya los 60.000. Solo en las últimas 24 horas, más de un centenar de personas —al menos 111— han sido asesinadas como consecuencia de los ataques.
1/08/2025









