En plena emergencia humanitaria en Gaza, Israel ha aprobado la creación de 22 nuevos asentamientos en Cisjordania ocupada, la mayor expansión colonial en más de 30 años. Esta decisión coincide con la implementación de un sistema de distribución de ayuda alimentaria en Gaza, fuertemente criticado por Naciones Unidas, que acusa a Israel de usar la comida como herramienta de desplazamiento forzado.
Los nuevos asentamientos, legalizados por el ministro de Defensa, Israel Katz, y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, transforman puestos avanzados ilegales en enclaves autorizados bajo la ley israelí. Según la BBC, Katz justificó la medida como una forma de impedir la creación de un Estado palestino, mientras que Smotrich proclamó: “¡El próximo paso es la soberanía!”.
Entre tanto, organizaciones como Peace Now alertan que esta expansión “reconfigurará drásticamente Cisjordania” y profundizará la ocupación. A la vez, que el portavoz del presidente palestino Mahmoud Abbas calificó la medida como una “escalada peligrosa” que arrastra a la región a más inestabilidad.
Esta nueva expansión coincide con una serie de operativos de distribución de alimentos en Gaza, dirigidos por la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF), respaldada por Israel y Estados Unidos. Sin embargo, la ONU y otras organizaciones humanitarias se han negado a participar, alegando que el sistema vulnera los principios humanitarios.
“La ayuda se distribuye en condiciones caóticas, bajo vigilancia, y sirve para forzar a la población a desplazarse a zonas específicas”, denunció John Whittall, jefe de la OCHA en los territorios palestinos. Para Naciones Unidas, la GHF representa un modelo de “privación deliberada” y control poblacional.
El caos ha sido el protagonista de la esta distribución de alimentos despues de casi 3 meses de bloqueo total. Muestra de ellos es que entre el martes y el jueves, al menos cuatro personas murieron, dos por estampida y dos por disparos, mientras intentaban acceder a la ayuda. Además, soldados israelíes abrieron fuego para “restablecer el orden”, según su versión, y helicópteros sobrevuelan sobre las masas de gazaties y realizan “disparos de advertencia” sobre las multitudes hambrientas esperando poder recibir la ayuda.
Euronews reporta que los sacos de 25k harina venden hasta en 500 dólares, en una zona donde ya no circula el dinero, el alimento se ha vuelto más escaso que nunca, y su acceso, un riesgo de vida. En este contexto, el Programa Mundial de Alimentos, alerta que “las necesidades humanitarias son incontrolables” y advierte que la GHF no podrá cubrir las necesidades de los 2 millones de habitantes de Gaza.
Esta doble estrategia por parte de Israel de expandir asentamientos en Cisjordania y restringir el acceso a comida en Gaza, parece apuntar a un objetivo político claro: consolidar el control territorial mientras se desplaza y fragmenta a la población palestina. El hambre y el desarraigo se convierten así en instrumentos de poder.
Esto ocurre, justo cuando países como España y Francia están reactivando el impulso hacia una solución de dos Estados con miras a la cumbre franco-saudí en junio en la sede de la ONU en Nueva York. Igualmente, cabe recordar que ya en 2024, . Sin embargo, Israel avanza en hechos consumados: más colonias, más muros, menos Palestina, extendiendo su ocupación a oídos sordos de la comunidad internacional y donde ya no sólo hay se trata de adueñarse de tierras pero ahora de una ocupación de la vida misma de los palestinos en Gaza.
Esto sucede mientras España y Francia reavivan el debate sobre la solución de dos Estados en Europa, de cara a la próxima cumbre franco-saudí en la ONU. Sin embargo, sobre el terreno, Israel impone su mandato. Si bien el máximo tribunal de la ONU emitió una opinión consultiva en 2024, en la que afirmaba que “la presencia continua de Israel en el Territorio Palestino Ocupado es ilegal” y la Corte Internacional de Justicia indicó que los asentamientos israelíes “han sido establecidos y se mantienen en violación del derecho internacional”, la expansión israelí continúa y ya no es solo territorial, sino que tambien se adueña del hambre y la sobrevivencia gazatí.
29/05/2025

 
		 
 
 






 


