El programa de ayuda directa a la vivienda en Marruecos, dirigido a familias de bajos ingresos y clase media, ha superado las expectativas en su primer año de implementación, según afirmó el Secretario de Estado de Vivienda, Adib Benbrahim, durante una sesión de preguntas orales en la Cámara de Consejeros.
Benbrahim destacó el éxito del programa, que ha beneficiado a 48.000 familias de un total de 150.000 solicitudes recibidas. Esto representa un avance significativo hacia el objetivo de facilitar el acceso a la vivienda para un amplio sector de la población. El Secretario de Estado enfatizó que estos resultados confirman que el programa se encuentra en el camino correcto.
La distribución de los beneficiarios refleja la naturaleza inclusiva del programa. Un 64% corresponde a la clase media, mientras que el 34% restante pertenece a familias de bajos ingresos. Un dato destacable es la participación de la diáspora marroquí, con un 25% de los beneficiarios.
La simplificación de los trámites ha sido crucial para el éxito del programa. El único requisito es no ser propietario de una vivienda y comprometerse a establecerla como residencia principal durante al menos cinco años. La digitalización del proceso de solicitud ha agilizado la gestión y ha contribuido al gran interés generado.
Benbrahim resaltó que este programa busca corregir las deficiencias de iniciativas anteriores, que estaban principalmente orientadas a los promotores inmobiliarios. Este nuevo enfoque ha ampliado la oferta y ha permitido llegar a un mayor número de familias necesitadas.
La transparencia y la fiabilidad de los datos presentados son aspectos cruciales, según el Secretario de Estado. La información se verifica a través de diversas instituciones como el Registro de la Propiedad, la Caja de Depósito y Gestión, el Ministerio de Finanzas y la Dirección General de Impuestos.
El gobierno ha superado su objetivo inicial, movilizando 96.000 unidades de vivienda frente a las 75.000 previstas inicialmente. Se ha destinado un presupuesto global de 3,79 mil millones de dirhams para este ambicioso programa. Las familias de menores ingresos se han beneficiado de la garantía Fogarim, que cubre hasta el 80% del coste de adquisición, además de la ayuda financiera directa.
Benbrahim aclaró las posibles confusiones entre este programa y el programa «Ciudades sin chabolas», enfatizando que el realojo de los habitantes de los barrios marginales se gestiona a través de mecanismos específicos, aunque algunos proyectos de vivienda social se han integrado en el programa de ayuda directa.
El compromiso del gobierno con este programa estratégico se mantiene firme. Benbrahim se comprometió a mejorar aún más la oferta de vivienda, alineado con las directivas reales para ampliar el acceso a la vivienda para todos, en línea con los principios del Estado social que rige la política gubernamental. El éxito del programa representa un paso importante hacia la consecución de este objetivo nacional.
07/05/2025









