En un movimiento estratégico para mitigar el impacto de las políticas proteccionistas impulsadas por el presidente estadounidense Donald Trump, Apple ha iniciado una operación logística a gran escala: alrededor de 1,5 millones de iPhones, equivalentes a unas 600 toneladas, han sido trasladados de forma urgente desde India hacia Estados Unidos. El objetivo principal es evitar el aumento de costos que supondrían los nuevos aranceles, cuya aplicación plena ha sido suspendida temporalmente por un plazo de 90 días.
Actualmente, importar iPhones fabricados en India implica un impuesto del 26%, significativamente menor que el más del 50% que se aplicaría a los dispositivos ensamblados en China si se activaran plenamente las nuevas medidas. Ante esta coyuntura, las autoridades aeroportuarias indias han reducido considerablemente los tiempos de despacho para facilitar la salida de los dispositivos, lo que demuestra una coordinación gubernamental activa en apoyo a la operación.
Apple produce aproximadamente el 80% de sus iPhones en China, pero la guerra comercial entre Washington y Pekín ha impulsado una diversificación geográfica en su cadena de suministro. India, que desde hace una década intenta posicionarse como un centro de manufactura global bajo la iniciativa “Make in India”, percibe esta situación como una oportunidad clave para ganar terreno frente a China. Sin embargo, la capacidad productiva india todavía representa un reto: actualmente, solo el 15% de los iPhones se fabrican allí, aunque Apple tiene previsto aumentar esa cuota al 25% para 2027.
El costo de no diversificar sería alto: según cálculos de UBS, un iPhone producido en China podría alcanzar un precio cercano a los 2.000 euros en el mercado estadounidense si los aranceles se aplican por completo. Frente a este escenario, India emerge como una alternativa atractiva pero aún limitada por su infraestructura industrial.
A largo plazo, esta maniobra no solo refleja la adaptación de Apple a un entorno económico volátil, sino también el creciente papel de India en la reconfiguración del mapa global de la manufactura tecnológica. A pesar de su desventaja actual frente a China, la India gana visibilidad como un actor estratégico que podría beneficiarse de las tensiones entre las dos principales economías del mundo.
11/04/2025









