UNICEF ha reiterado su llamado al cese de las hostilidades y al restablecimiento del alto el fuego en Gaza. La agencia de la ONU, dedicada a la protección de la infancia, ha denunciado la reanudación de los bombardeos y la ofensiva terrestre del ejército israelí desde el pasado 18 de marzo. Estas acciones han provocado la muerte de más de 300 menores, en su mayoría desplazados.
Una ofensiva devastadora
El 18 de marzo, el ejército israelí llevó a cabo 100 ataques simultáneos en la Franja de Gaza, poniendo fin al alto el fuego con Hamás. En menos de 48 horas, cientos de personas perdieron la vida, entre ellas al menos 183 niños.
Desde esa fecha, el número total de menores fallecidos a causa de los intensos bombardeos israelíes ha ascendido a 322, según datos de UNICEF.
La mayoría de estos niños eran desplazados que habían sido enviados a zonas designadas como refugios, muchas veces en tiendas de campaña o en edificios en ruinas. Sin embargo, incluso áreas como Al-Mawasi, en el sur de Gaza, que supuestamente debían ser seguras, han sido bombardeadas de manera regular por el ejército israelí.
Niños muertos durante la celebración del Aíd
Durante el mismo período, 609 niños han resultado heridos, según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia. Este domingo, más niños perdieron la vida en Khan Younis mientras celebraban la festividad del Aíd.
Además, desde el 2 de marzo, no se ha permitido la entrada de ayuda humanitaria a Gaza. En este contexto, UNICEF advierte que esta situación priva a los niños de los recursos esenciales que necesitan para alimentarse y recibir atención médica.
Por ello, la organización insiste en su llamado a todas las partes involucradas para que «cesen las hostilidades, restablezcan el alto el fuego y respeten sus obligaciones en virtud del derecho humanitario internacional para proteger a los niños».
02/04/2025









