La reciente inauguración de la Embajada de Madagascar en Rabat, el 27 de noviembre de 2024, refleja el fortalecimiento de las relaciones bilaterales entre ambos países. Con esta apertura, la capital marroquí cuenta ahora con 42 embajadas africanas, consolidando su posición como un centro diplomático clave en el continente. Sin embargo, los lazos entre Madagascar y Marruecos van más allá de la diplomacia. La historia une a ambas naciones desde la época en que el Rey Mohammed V y su familia fueron exiliados en Antsirabé entre 1954 y 1955. Décadas después, en 2016, el Rey Mohammed VI visitó el país, reforzando los vínculos políticos y económicos con una serie de iniciativas estratégicas, entre ellas la construcción de infraestructuras esenciales.
El comercio bilateral también ha crecido significativamente en los últimos años. En 2023, las exportaciones malgaches hacia Marruecos alcanzaron los 2,6 millones de dólares, con un notable crecimiento del 46% entre 2019 y 2023. Entre los productos más demandados figuran el clavo de olor, las gambas congeladas y la pimienta. Por otro lado, Marruecos exportó a Madagascar bienes por un valor de 6,8 millones de dólares en el mismo año, con una ligera disminución del 7%. Entre los productos más relevantes se encuentran fertilizantes minerales, sardinas en conserva y vehículos de transporte.
Un mercado con alto potencial para Marruecos
Madagascar se presenta como un destino de inversión atractivo para las empresas marroquíes, especialmente en sectores estratégicos. En el ámbito agroindustrial, el país ofrece oportunidades en la producción y exportación de cacao, café, especias y frutas tropicales, además de la pesca y acuicultura. Asimismo, el sector energético destaca por su creciente demanda de electrificación rural, con un fuerte interés en el desarrollo de plantas solares y redes híbridas mediante asociaciones público-privadas.
El turismo es otro sector con gran potencial, particularmente en el ámbito del turismo náutico y de cruceros, así como en la creación de eco-lodges y resorts de lujo. Además, la industria de la construcción y el desarrollo urbano presentan oportunidades en la expansión de zonas industriales y la construcción de viviendas para la clase media. Finalmente, la digitalización de los servicios financieros ha impulsado el crecimiento del sector fintech, con inversiones dirigidas a plataformas de pago móvil, banca digital y seguros.
Factores competitivos y un clima de inversión favorable
Más allá de sus recursos naturales y su ubicación estratégica entre África y Asia, Madagascar ofrece ventajas comparativas respecto a otros países africanos. Su mano de obra cualificada y de bajo costo, junto con su experiencia en sectores como la industria textil y los servicios externalizados, refuerzan su atractivo para las empresas extranjeras. Además, el país es líder mundial en la producción de vainilla y cuenta con importantes reservas de níquel, cobalto y tierras raras.
El marco legal e institucional también ha mejorado con la reciente reforma de la ley de inversiones, alineada con los estándares internacionales. Este marco normativo garantiza la protección de los inversores, moderniza los procesos de resolución de disputas y simplifica los trámites administrativos. Adicionalmente, se han implementado medidas para fomentar la inversión en telecomunicaciones, minería y sectores estratégicos mediante incentivos fiscales y la digitalización de trámites empresariales.
Un ecosistema de inversión estructurado y dinámico
Para facilitar la llegada de capital extranjero, Madagascar cuenta con el Economic Development Board of Madagascar (EDBM), una agencia gubernamental dedicada a atraer y apoyar a los inversores. Dependiente de la Presidencia de la República, esta entidad se encarga de promover las inversiones, mejorar el clima de negocios y agilizar los procedimientos administrativos a través de un sistema de ventanilla única. Además, el gobierno ha reforzado el mecanismo de Diálogo Público-Privado (DPP), con el objetivo de estructurar las discusiones entre los inversores y el Estado para mejorar el entorno empresarial.
En este contexto, Madagascar se perfila como una plataforma de oportunidades para Marruecos en sectores clave de la economía global. Con un mercado en expansión, recursos estratégicos y un marco regulador en evolución, el país ofrece un entorno propicio para los negocios marroquíes que buscan diversificar su presencia en África y el océano Índico.
24/03/2025