Según el informe «Africa’s Competitiveness in Global Battery Supply Chains» publicado en octubre de 2024, inscrito en el marco de un programa conjunto del Instituto Faraday y el Fondo Ayrton con el apoyo gubernamental de UK, Marruecos está aprovechando su acceso a recursos clave como cobalto, litio y manganeso para integrarse en la cadena de valor de baterías eléctricas. Estos materiales, esenciales para la fabricación de baterías, otorgan al país una ventaja competitiva significativa, especialmente en un contexto donde Europa y Estados Unidos buscan diversificar sus proveedores y reducir su dependencia de China.
En este contexto, el puerto de Tánger Med, uno de los centros logísticos más destacados del mundo, desempeña un papel crucial en este desarrollo. Su proximidad a mercados internacionales y su moderna infraestructura garantizan la exportación eficiente de baterías y componentes, consolidando a Marruecos como un socio estratégico para Europa y América del Norte. Esta capacidad logística refuerza su atractivo para las inversiones extranjeras en el sector de manufactura avanzada.
Por su parte, el Acuerdo de Libre Comercio Continental Africano (AfCFTA) también juega un papel clave, permitiendo a Marruecos colaborar con otras naciones africanas en el desarrollo de cadenas de suministro regionales. Esto no solo fomenta el comercio intraafricano, sino que también optimiza los costos y fortalece la competitividad de la región en el mercado global de baterías.
Sin embargo, el éxito de Marruecos no ha estado exento de desafíos. El país debe superar la competencia internacional, garantizar acceso a tecnologías avanzadas y formar a una fuerza laboral especializada. A pesar de ello, iniciativas gubernamentales como la creación de zonas económicas especiales y el apoyo a la manufactura local han impulsado la confianza de inversores globales.
Además, el informe destaca que Marruecos podría desempeñar un papel clave en la manufactura de baterías LFP (litio-ferrofosfato), consideradas más económicas, seguras y sostenibles. La integración vertical, desde la minería hasta la manufactura, permitiría al país ofrecer productos competitivos a mercados como la Unión Europea y Estados Unidos, que enfrentan déficits de suministro. Este enfoque posiciona a Marruecos no solo como un exportador de materias primas, sino también como un innovador en soluciones energéticas avanzadas.
Con estas estrategias, Marruecos no solo busca satisfacer la demanda local de baterías, sino también convertirse en un líder en los mercados europeo y estadounidense. Este enfoque subraya su compromiso con el desarrollo sostenible y su ambición de liderar el futuro energético global, consolidando su posición como un modelo de innovación y crecimiento en África. .
03/01/2025









