Un estudio de la Comisión Económica para África (ECA) indica que los países norafricanos: Argelia, Egipto, Libia, Marruecos, Mauritania, Sudán y Túnez, es una de las regiones menos integradas del mundo lo que limita sus opciones de expansión comercial a nivel mundial.
El autor del informe, Aziz Jaid, economista de ECA en África del Norte asegura que los países norafricanos apenas reportan poco más de 5% de comercio intrarregional, a pesar de contar con los principios vertebradores de un mercado dinámico integrado, con un Producto Interior Bruto lo suficientemente alto por habitante y una continuidad del espacio físico y buenas infraestructuras de transporte. Sin embargo, no se ha logrado crear una cadena de valor interegional que les contribuya a bajar costos, mejorar la producción industrial en equipo y aprovechar de mejor manera las opciones comerciales mundiales.
Jaid explica que, aunque existen los determinantes aún no ha sido suficiente para situar los intercambios entre empresas en su nivel óptimo y explotar el potencial de desarrollo de cadenas de valor regionales (CVR). El estudio ubica a Túnez y Egipto como los países mejor integrados en el comercio entre los países del Norte de África con exportaciones que representan poco mas del 10% sus exportaciones totales. Mientras que Marruecos, Libia y Mauritania registran niveles bastante bajos de exportaciones interegionales totales de bienes.
La ECA ha identificado tres sectores claves para potenciar la interconexión en África del Norte: fertilizantes fosfatados, energías renovables y textil y confección. Estos sectores ocupan una porción importante en la producción local de cada uno de los países del área y ademas podrían resolver la crisis alimentaria, la crisis energética y la conservación y protección de los empleos en la zona norafricana.
En este contexto, la investigación insta al Norte de África a impulsar soluciones en conjunto ya que dispone de las mayores reservas de fosfatos del mundo, de los recursos humanos, económicos y técnicos necesarios, y del marco institucional capaz de promover un mayor y más sostenible uso de los fertilizantes para contribuir al objetivo deseado de una Revolución Verde en la agricultura africana.
Marruecos, Egipto y Argelia poseen las tres primeras reservas africanas de este mineral y se encuentran entre los 15 primeros del mundo en cuanto a producción, según Mineral Commodity Summaries (2022). Además, Marruecos posee más de dos tercios de las reservas mundiales de fosfato. Es así como estos países desempeñan un papel crucial para la seguridad alimentaria en la subregión y en todo el continente, pero su participación en el comercio intrarregional es pequeña, ningún país supera el 10% en las exportaciones norteafricanas.
El estudio recomienda que Argelia debería importar más fertilizantes minerales o químicos de Túnez o Marruecos, a la vez que Marruecos y Túnez deberían sustituir sus importaciones de fertilizantes químicos nitrogenados de Rusia por importaciones procedentes de Argelia. Sin embargo, la situación geopolítica se antepone en estos casos. Y Sudán podría sustituir sus importaciones de fertilizantes nitrogenados químicos de Jordania con importaciones de Egipto o Argelia.
Es así como en general el comercio entre los países del Norte de África en el sector de los fosfatos y sus derivados químicos sigue siendo bastante escaso en comparación con el comercio con el resto del mundo.
En el campo de la energía, los países del Norte de África se enfrentan a desafíos muy diferentes en función de la disponibilidad y acceso a los recursos energéticos. Si bien tienen un enorme potencial en términos de energías renovables, y de energía solar en particular, el estudio revela que la ausencia de datos estadísticos precisos limita la evaluación del alcance de estas capacidades.
Para el economista Jaid, los países de la región pueden desarrollar una CVR en la industria fotovoltaica y de energía solar. El informe propone que las empresas locales pueden encargarse de la producción de silicio y del montaje de los componentes que constituyen los paneles fotovoltaicos. En cuanto a producción de energía solar, cabe recordar que el Norte de África forma parte de un plan estratégico global para abastecer de energías limpias a Europa, que prevé utilizar al menos un 20% de estas energías de aquí a 2030. Es así como la Comisión Económica reconoce que es una gran oportunidad para la región, pero considera que ningún país puede desarrollar esta industria por sí mismo.
El sector textil y de la confección es responsable de la creación de gran parte de empleo en algunas economías norafricanas y representa una palanca estabilizadora de la producción industrial. Es por esto que recomiendan el desarrollo de una sinergia de producción colaborativa y complementaria que les permita a los países de la subregión reducir los efectos de las perturbaciones en el mercado internacional, establecer un mecanismo de protección interna de empleo e ingresos y promover el aumento de la competitividad de un importante tejido de pequeñas y medianas empresas.
En conclusión, la Comisión Económica Europea afirma que la región cuenta con las materias primas, la capacidad de producción, costos atractivos de mano de obra, pero deben mejorar la infraestructura de transporte y logística, lograr ciertas reformas institucionales y desarrollar las capacidades de los actores locales. Todo esto acompañado de acuerdos político-económicos que prioricen el desarrollo comercial.
9/12/2024









