La dificultad para acceder a una vivienda en propiedad está extendiendo el alquiler como una opción a largo plazo, afectando no solo a los jóvenes, sino también a personas mayores de 35 años.
En este sentido, aunque el alquiler es más frecuente entre los menores de 35 años, los datos del Instituto Nacional de Estadística revelan que el 34% de las personas de entre 30 y 44 años viven de alquiler, cifra que ha crecido notablemente en las últimas dos décadas y se espera que siga aumentando. Este fenómeno, según el Instituto de Investigación Urbana de Barcelona (IDRA), podría extenderse hasta la vejez para una gran parte de la población española, especialmente entre quienes no esperan heredar una vivienda.
Además, las ayudas destinadas a los jóvenes, como el Bono de Alquiler Joven de 250 euros mensuales, han sido criticadas por su impacto limitado. De hecho, algunos expertos señalan que estas ayudas suelen terminar inflando los precios del alquiler en lugar de beneficiar directamente a los inquilinos.
A la situación anterior se suma la incertidumbre sobre herencias. Según una encuesta realizada en Madrid y Barcelona, publicada en RTVE, solo el 30% de las personas entre 35 y 64 años espera heredar una vivienda, una cifra que cae aún más entre los extranjeros. Con este marco, para muchos, el alquiler seguirá siendo la única opción viable, marcando un cambio significativo en los patrones de acceso a la vivienda en España.
04/12/2024









