Durante la jornada del sábado, se celebró una ceremonia que marcó la conclusión de la primera fase de restauración y adecuación de la capilla del monasterio de Toumliline, en las montañas de Azrou. Este proyecto ha sido posible gracias a la colaboración de la Fundación Memorias para el Futuro, el Centro Interconviccional Ta’aruf de la Rabita Mohammedia de los Ulemas, y el apoyo de la Fundación belga Future 21 y USAID.

En este sentido, Aicha Haddou, presidenta del Centro Interconviccional Ta’aruf, enfatizó que la restauración representa un acto de fe hacia el futuro y un compromiso con la preservación del patrimonio interreligioso. Este lugar no solo simboliza el diálogo y el respeto mutuo, sino que también debe ser transmitido a las futuras generaciones.
Por su parte, la Baronesa Martine Jonet-de Bassompierre subrayó la relevancia simbólica de la restauración, destacando que Toumliline debe ser un centro de construcción de un futuro pacífico. La colaboración en este proyecto refleja la voluntad común de trabajar hacia un futuro más armonioso, donde el diálogo y la responsabilidad compartida son esenciales.
22/09/2022