Un experto de la ONU denunció la gestión del agua como una simple mercancía, argumentando que debe ser considerada un bien común accesible para todos, no un recurso para la explotación privada. Pedro Arrojo-Agudo, Relator Especial sobre el derecho al agua, instó a diferenciar entre el agua para la supervivencia y la utilizada con fines económicos, priorizando la salud pública sobre los intereses comerciales. Cuestionó si el valor del agua para la exportación agrícola puede compararse con su importancia para la salud de las familias.

Arrojo-Agudo criticó la visión del agua como un producto de mercado, donde el acceso depende de la capacidad económica. Esta perspectiva, según él, contradice los derechos humanos. El experto aboga por una gestión basada en la equidad, la transparencia y la responsabilidad colectiva, considerando los ecosistemas acuáticos como un patrimonio natural que debe protegerse para todos, incluyendo las futuras generaciones.
Finalmente, el relator instó a los gobiernos a establecer acuerdos e instituciones que garanticen una gestión global del agua para combatir la crisis climática y preservar el ciclo hídrico como un bien común. Aseguró que garantizar el derecho humano al agua y al saneamiento es un desafío democrático que los Estados deben afrontar.
17/09/2024