La situación en Gaza ha alcanzado niveles críticos de desesperación, según declaraciones de Sigrid Kaag, coordinadora humanitaria y de reconstrucción de la ONU para Gaza. En medio del prolongado conflicto, las infraestructuras esenciales han sido destruidas, dejando a los civiles sin protección ni acceso a necesidades básicas como agua potable y alimentos. Además, las condiciones insalubres en los refugios han provocado la reaparición de enfermedades previamente erradicadas como la polio, subrayando la grave situación sanitaria que enfrenta la población.

Durante una reciente sesión del Consejo de Seguridad, Kaag enfatizó la necesidad de un alto el fuego inmediato, la liberación de todos los rehenes y un acceso humanitario sin trabas para permitir la entrega de ayuda a gran escala. Destacó la incapacidad de los actuales sistemas de ayuda para satisfacer las necesidades diarias de los gazatíes y la urgencia de una reconstrucción integral que no puede esperar a resoluciones políticas. La continuación de esta crisis humanitaria, advirtió, solo podrá resolverse mediante una solución política que asegure un futuro sostenible para la región.









