El expresidente sudafricano Thabo Mbeki admitió que su gobierno estuvo involucrado en la planificación de los ataques xenófobos de 2008. Según Mbeki, el objetivo era presionar a los zimbabuenses residentes en Sudáfrica para que regresaran a su país y votaran contra Robert Mugabe en la segunda vuelta electoral. Un informe de inteligencia, que Mbeki lamenta no haber desclasificado, detallaba la operación.
Estos ataques, que se extendieron por todo el país, resultaron en al menos 62 muertos, 1.700 heridos y 100.000 desplazados. Mbeki reconoció el error cometido y alertó sobre el creciente sentimiento de «afrofobia xenófoba» en Sudáfrica.

Con esto, la violencia xenófoba continúa siendo un problema recurrente en el país. En 2019, nuevos ataques provocaron la muerte de varias personas y la huida de numerosos nigerianos. Miles de trabajadores extranjeros, principalmente de Zimbabue, Mozambique y Congo, también se han visto obligados a abandonar Sudáfrica en los últimos años.
06/09/2024