En un contexto de escasez de recursos hídricos, el proyecto de la planta de tratamiento de aguas residuales y el sistema de reutilización de aguas tratadas (REUSE) en Tánger se posiciona como una iniciativa clave para mitigar el déficit estructural de agua mediante una gestión sostenible de las aguas residuales. Este proyecto, que opera desde la planta de Boukhalef con una capacidad de 42.700 m³ diarios, cubre una superficie de 355 hectáreas, logrando un ahorro de aproximadamente 2,4 millones de m³ de agua al año, lo que equivale al consumo de agua potable de una ciudad de más de 75.000 habitantes.

El operador Amendis, encargado de la gestión del proyecto, tiene previsto extender la red de reutilización en 95 km adicionales y construir cinco nuevas estaciones de bombeo. Además, trabaja en tres ejes fundamentales: la reutilización de aguas tratadas para el riego de áreas verdes, la mejora del rendimiento de la red de distribución de agua potable, y la sensibilización sobre la conservación del agua. Desde 2015, la planta de Boukhalef ha reutilizado cerca de 9 millones de m³ de agua, con el objetivo de alcanzar un ahorro anual de 3 millones de m³ a partir de 2024. Este esfuerzo se enmarca en el Programa Nacional de Abastecimiento de Agua Potable e Irrigación, que busca movilizar 137 millones de m³ de agua para 2027. 31/8/2024