El equipo de UNICEF ha regresado de una semana en Bangladesh, y están profundamente preocupados por el impacto que la reciente violencia y el conflicto continuo están teniendo en los niños.

Han confirmado que al menos 32 niños murieron durante las protestas de julio, y muchos más resultaron heridos o detenidos. Consideran esta situación trágica y condenan todos los actos de violencia, extendiendo sus más sinceras condolencias a las familias que han perdido a sus hijos.
Es crucial que los niños estén protegidos en todo momento, una responsabilidad que todos comparten.
Han recibido informes que indican la detención de menores, lo que les alarma profundamente. Recuerdan a las autoridades que, conforme al derecho internacional y la Convención sobre los Derechos del Niño, firmada por Bangladesh, es fundamental poner fin a la detención de niños en todas sus formas. Subrayan que ningún niño debe ser arrestado o retenido por estar en un lugar determinado, por su origen, religión o por las acciones o creencias de su familia.
Apoyar a los niños afectados por la violencia es una de sus prioridades en UNICEF. Durante su visita, observaron un aumento del 250% en la demanda de la línea de ayuda infantil 1098, respaldada por UNICEF, donde consejeros capacitados escuchan a los niños, los refieren a los servicios adecuados y hacen un seguimiento de sus casos.
Además, 1.100 trabajadores sociales, formados por UNICEF y el Departamento de Servicios Sociales, están proporcionando apoyo psicológico a los niños cuya salud mental se ha visto afectada por la violencia y los toques de queda.
Consideran que una de las mejores maneras de ayudar a los niños a recuperarse y garantizar su seguridad es reabrir todas las escuelas, reanudar la enseñanza y reunir a los niños con sus amigos y profesores. Actualmente, 30 millones de estudiantes, desde preescolar hasta secundaria, han perdido 10 días de clases, lo que agrava las pérdidas de aprendizaje provocadas por cierres anteriores debido al calor, ciclones e inundaciones. Aunque celebran la reapertura de las escuelas primarias en muchas zonas de Bangladesh desde el 4 de agosto, todavía hay aproximadamente 15,5 millones de escolares que no pueden retomar sus estudios, lo que pone en riesgo su futuro, especialmente en el caso de las niñas.
Durante sus reuniones con el Gobierno, socios de UNICEF y organizaciones que trabajan con jóvenes, enfatizan que la Convención sobre los Derechos del Niño reconoce el derecho de los niños a la libertad de asociación y reunión pacífica.
Subrayan que los niños y jóvenes son el futuro de Bangladesh y deben ser protegidos cuando expresan sus opiniones.
02/08/2024