Bajo el liderazgo del Rey Mohammed VI, Marruecos ha consolidado sus derechos legítimos sobre el Sáhara, gracias al plan de autonomía marroquí, apoyado por una diplomacia activa y proactiva.
Desde la ascensión al trono del Soberano, Marruecos ha logrado avances significativos, como la reconocimiento de grandes potencias, incluidos los Estados Unidos, de la marroquinidad de la región del Sáhara, consolidando al Reino como un actor crucial y respetado a nivel internacional.
El apoyo internacional al plan de autonomía marroquí mencionado como única solución al conflicto regional sobre el Sahara ha aumentado notablemente. Calificado como serio y creíble por las resoluciones consecutivas del Consejo de Seguridad de la ONU desde su presentación en 2007 por Marruecos, el plan cuenta ahora con el apoyo de más de 107 Estados miembros de la ONU.

«El Sahara es el prisma a través del cual Marruecos ve su entorno internacional», destacó el rey en un discurso, subrayando que la cuestión del Sahara es central en la diplomacia marroquí.
Esta estrategia ha sido fortalecida por la decisión de unos treinta países de abrir representaciones diplomáticas en El Aaiún y Dajla, lo que no solo respalda la integridad territorial de Marruecos, sino que también reconoce el nivel de desarrollo alcanzado por las provincias del sur.
El apoyo a la iniciativa de autonomía refleja una comprensión creciente dentro de la comunidad internacional sobre la necesidad de resolver la cuestión del Sahara en el contexto de la soberanía de Marruecos.
Mientras Marruecos sigue cosechando éxitos políticos y diplomáticos, sus adversarios enfrentan derrotas continuas, como lo demuestra la falta de reconocimiento de más del 84% de los Estados miembros de las Naciones Unidas del «Rasd».
«La dinámica internacional favorable al plan de autonomía y la proactividad de la diplomacia marroquí aíslan cada vez más al Polisario y sus apoyos», destaca Samuel Millner, experto del Centro de Derecho Internacional y del Medio Oriente en Virginia, marcando un cambio en la percepción global de la disputa.
25/7/2024