Durante el G20 en Río de Janeiro, el Gobierno portugués destacó que el acceso al agua y al saneamiento deben considerarse derechos humanos, no solo una acción climática, durante la Reunión Ministerial de Desarrollo del G20.
Portugal, junto a las principales economías del mundo, mostró su preocupación por la falta de acceso universal al agua potable y saneamiento básico, señaló Inês Domingos, secretaria de Estado de Asuntos Europeos. Domingos resaltó que la resiliência del agua es un área de interés común entre Portugal y Brasil.

En la declaración final, los responsables del G20 y observadores como Portugal, advirtieron sobre el déficit en el acceso a estos recursos esenciales, exacerbado por el cambio climático.
Domingos subrayó que Portugal ha trabajado intensamente para combatir los efectos del cambio climático, especialmente en relación con el agua, presionando a la Unión Europea para incluir la resiliência del agua en la agenda.
Los ministros y representantes presentes en la reunión se comprometieron a priorizar el agua, el saneamiento y la higiene en sus agendas nacionales e internacionales, y pidieron aumentar la cooperación técnica para mejorar estos servicios en áreas rurales y suburbanas.
Portugal, invitado por Brasil como miembro observador del G20, estuvo representado por Inês Domingos, el ministro de Asuntos Exteriores Paulo Rangel, y el secretario de Estado Adjunto y de Presupuesto, José Maria Brandão de Brito.
23/07/2024