Los Estados Unidos han anunciado una ayuda de emergencia de 315 millones de dólares para Sudán, un país amenazado por una hambruna de proporciones históricas. Este apoyo incluirá alimentos y agua potable, además de programas de detección y tratamiento urgente de la malnutrición infantil, reporta hoy France24.
La decisión llega en un momento crítico, cuando se estima que cinco millones de personas en Sudán sufren de hambre extrema, y la escasez de alimentos también afecta a los países vecinos, donde dos millones de sudaneses han buscado refugio.
Desde abril de 2023, Sudán ha sido escenario de un conflicto mortal entre el ejército liderado por el general Abdel Fattah al-Burhane y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FSR), dirigidas por su ex-adjunto y ahora rival, el general Mohamed Hamdane Daglo.

«El mundo debe despertar ante la catástrofe que se está desarrollando ante nuestros ojos», declaró Linda Thomas-Greenfield, embajadora de los Estados Unidos ante las Naciones Unidas. «Hemos visto proyecciones de mortalidad que indican que más de 2.5 millones de personas, aproximadamente el 15% de la población en las regiones más afectadas de Darfur y Kordofán, podrían morir para finales de septiembre», añadió.
La diplomática también advirtió que esta crisis humanitaria es la más grande del planeta y podría empeorar con la llegada de la temporada de lluvias. El conflicto en Sudán ya ha causado decenas de miles de muertes, y tanto trabajadores humanitarios como la ONU han estado alertando sobre el sufrimiento que la población sudanesa ha experimentado durante el último año, especialmente en Darfur, al oeste del país.
«El escenario más alarmante sería que Sudán experimente la hambruna más mortífera desde la que sufrió Etiopía a principios de los años 80, donde 1.2 millones de personas perdieron la vida», comentó Samantha Power, administradora de la USAID. Power criticó duramente a ambos bandos del conflicto, señalando que los paramilitares «saquean sistemáticamente los almacenes humanitarios, roban alimentos y ganado, destruyen instalaciones de almacenamiento de granos y pozos en las comunidades sudanesas más vulnerables».
Por otro lado, acusó al ejército de «renegar completamente de sus compromisos y responsabilidades» hacia los sudaneses al impedir que la ayuda cruce la frontera con Chad para ingresar a Darfur.
15/6/2024